El año que está naciendo llega con el empuje que provocaron los movimientos feministas, y que tuvo su punto culminante el miércoles último, con la sanción de la ley que permite interrumpir el embarazo.

El deportivo es un ambiente donde también las mujeres siguen ganando espacio, pero no sólo a nivel competitivo sino en el plano dirigencial.

La zona de Banfield, en el sur de la Provincia de Buenos Aires, es un lugar que ya tiene una marca registrada: el Club Atlético Banfield está presidido por Lucía Barbuto, desde octubre de 2018; y el club Defensores de Banfield tiene como presidenta a Marina Lesci, quien ocupa el cargo desde 2008. Lesci, al mismo tiempo, es la actual presidenta del Honorable Concejo Deliberante de Lomas de Zamora, designada por el oficialismo que comanda el intendente Martín Insaurralde, en las elecciones de 2019.

La particularidad de Defensores es que será uno de los integrantes de la próxima edición de la Liga Argentina de Clubes de Voleibol, que se iniciará el 21 de enero próximo en la provincia de Entre Ríos.

Lesci, a los 37 años, transitó con mucha emoción lo que se vivió en los últimos días en el Senado de la Nación. “Es un absoluto acto de justicia social, y ampliación de derechos para las mujeres y personas gestantes”, señala.

La dirigente es socia del club desde que tenía dos años, debido a que nació a tres cuadras de la institución. “Siempre estuve vinculada a Defensores, en el cual pasé toda mi infancia. Con el tiempo practiqué gimnasia artística, vóley y natación”, le explica Lesci a Página/12.

El trabajo que hizo ella para que la entidad siga funcionando fue enorme, junto a un grupo de amigos de la adolescencia. “Cuando yo tenía entre 20 y 22 años -relata Lesci-, siempre con un grupo de amigos, nos enteramos que el club estaba en quiebra. Como la posibilidad de remate era real, decidimos armar una Comisión de Apoyo, muy juvenil, con la intención de hacer eventos que sirvan para recaudar algo de dinero”.

Y agrega: “Nos íbamos con la bicicleta, vecino por vecino, vendiendo rifas y promocionando actividades que sirvan para ayudar al club. Un día le preguntamos a la Comisión Directiva de ese entonces sobre el destino de los fondos que nosotros juntábamos, pero ellos decidieron irse y no continuar”.

La sorpresa fue grande para esa Comisión de Apoyo, debido a que tuvo que hacerse cargo de la institución sin ninguna experiencia. “De golpe quedamos al frente de un club, en junio de 2008, que en marzo de 2009 tenía fecha de remate”, cuenta Lesci. Ellos empezaron a trabajar, y entendieron que el saneamiento documental no era la única vía, ya que si se salvaba el club de esa manera, pero no de forma vecinal y social, se transformaría en una entidad que evitaba la quiebra pero que se encontraría vacía por dentro.

“Con mucha trabajo legal, financiero y económico, y con la premisa de que el club era vital para el barrio, se frenó la quiebra. Luego de 13 años, que pasaron casi sin darnos cuenta, se consiguieron logros deportivos, se mejoró la infraestructura, se generó mucho sentido de pertenencia con el barrio, algo fundamental”, relata la presidenta.

El club, cuando ellos asumieron, contaba con 300 socios activos, quienes en su mayoría eran morosos y el dinero no alcanzaba para pagar los costos fijos. Defensores cuenta actualmente con una masa social de tres mil personas.

La clave principal para salvar al club, según Lesci, fue esa: “Más allá de todo lo legal y de lo que se hizo para juntar fondos, lo fundamental fue sumar tanta cantidad de socios, que es lo que sostiene al club diariamente. El mantenimiento es con la cuota social, y los deportes tienen algún que otro arancel. Pero lo más genuino fue este paso de los 300 socios a tres mil, que hizo que el club sea sustentable. La tarea fue sumar disciplinas deportivas, y que la gente se acercara a participar de ellas”.

--¿Cómo te nació la inquietud por ser presidenta?

--No fue algo tan pensado, sino que la Comisión Directiva se fue en ese momento, y se dio de manera natural. Una no tenía la obsesión de ser presidenta. Con el tiempo, mucha gente se fue sumando a las distintas comisiones, y no hubo elecciones porque nunca hubo otra lista.

La situación que se vive en Banfield, con presidentas mujeres, es otro orgullo para Lesci. “Creo que por suerte está pasando en muchos clubes, que van apareciendo cada vez más dirigentes mujeres. No sólo acá, sino en otros barrios y en otros clubes”, destaca. “Tengo una gran relación -aclara- con Lucía (Barbuto), y en las cosas que pudimos hacer juntas es muy amable”.

Defensores se mezclará este año en la elite del voleibol argentino, luego de que aceptara la invitación a participar de parte de la Asociación de Clubes. “Es un proceso que lleva más de diez años. El club se había desafiliado de la Federación Metropolitana, y entonces hubo que empezar desde el escalón más bajo. Y siempre fue un proyecto a largo plazo”, explica Lesci.

El plantel actual tiene más del 80 por ciento de los jugadores surgidos en la entidad, totalmente amateurs, mientras muchos equipos de la Liga poseen jugadores profesionales. Inclusive, muchos de ellos fueron tentados por otros clubes para irse, pero el sentido de pertenencia fue más fuerte y decidieron quedarse.

“El equipo fue ascendiendo en las categorías hasta llegar a División de Honor en el torneo metropolitano, y creo que la liga nos premió y nos dio la invitación para poder participar”, remarca la presidenta.

Defensores no tuvo que invertir para estar en el certamen más competitivo. Los jugadores no cobran dinero, y los costos del torneo se pudieron afrontar por una gran cantidad de sponsors, que se emocionaron con la historia del club. El municipio de Lomas de Zamora también realiza un gran aporte en ese aspecto. “Sin todos ellos hubiera sido imposible”, añade.

--¿El objetivo final es consolidarse o sólo participar?

--Esta es una experiencia muy fuerte para todos los chicos, y la intención es consolidarse como uno de los equipos estables de la liga, y que no sea una participación esporádica. Si bien depende de muchísimos factores, no tengo duda que vamos a dejar bien parada a la institución.

Lesci expresa que en la próxima renovación de autoridades no continuará como presidenta, luego de 13 años, aunque seguirá formando parte de la Comisión Directiva.

El camino de Defensores de Banfield para llegar a la elite del voleibol argentino fue largo, y este club de barrio tendrá su recompensa con el regocijo que tendrá interiormente desde el 21 de enero.