El Gobierno argentino expresó su "grave preocupación" por la operación de un submarino de Estados Unidos en el Atlántico Sur con apoyo británico, información surgida de la cuenta oficial de twitter del Comando de Fuerza Submarina del Atlántico (COMSUBLANT).

"Un avión del Reino Unido del Territorio Británico Independiente de Ultramar (BIOT) Islas Malvinas colaboró ​​recientemente con el USS Greeneville (SSN 772) en el océano abierto del Atlántico Sur, demostrando el alcance global de las fuerzas de ambas naciones", expresaron desde el Comando.

A través de un comunicado, Cancillería Argentina advirtió que "la presencia de naves susceptibles de portar y emplear armamentos nucleares en el Atlántico Sur contradice la Resolución 41/11 de la Asamblea General de las Naciones Unidas (Zona de Paz y Cooperación en el Atlántico Sur)".

Aquella disposición exhorta a los Estados de todas las demás regiones, en especial a los Estados militarmente importantes, a que "respeten escrupulosamente la región del Atlántico Sur como Zona de Paz y cooperación, en particular mediante la reducción y eventual eliminación de su presencia militar en dicha región, la no introducción de armas nucleares o de otras armas de destrucción masiva".

"No es la primera vez que la Argentina ha marcado la presencia de una base militar británica en las Islas Malvinas, que es contraria a distintas resoluciones de las Naciones Unidas como la 31/49, que pide a los Gobiernos de la Argentina y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte que aceleren las negociaciones relativas a la disputa sobre soberanía e insta a las partes a que se abstengan de adoptar decisiones unilaterales que entrañen la introducción de modificaciones unilaterales en la situación mientras las Islas están atravesando por el proceso negociación", subrayaron en el comunicado.

En ese sentido, manifestaron que "la utilización de esas fuerzas instaladas ilegalmente para objetivos geoestratégicos globales son una demostración acabada de que los argumentos utilizados por el Reino Unido nada tienen que ver con la relación bilateral con la Argentina".

Por último, la cartera liderada por Felipe Solá llamó a que "todos los Estados signatarios del Tratado sobre la proscripción de las armas nucleares en América Latina y el Caribe (Tratado de Tlatelolco) y sus Protocolos Adicionales respeten sus disposiciones y se abstengan de realizar todas aquellas actividades que pongan en peligro el estatuto de desnuclearización militar de la región". 

"Argentina lamenta que cuando estamos cumpliendo 50 años del Tratado de No Proliferación Nuclear, las relaciones internacionales se busquen seguir construyendo sobre la base de la extensión de las capacidades militares", concluyeron.

"Es una violación flagrante de la Zona de Paz y Cooperación del Atlántico Sur"

El gobernador de Tierra del Fuego, Antártida e Islas de Atlántico Sur, Gustavo Melella, mostró su preocupación ante el hallazgo, al señalar que la presencia del submarino "es una violación flagrante a la Zona de Paz y Cooperación del Atlántico Sur aprobada por resolución 41/11 de la Asamblea General".

Para el mandatario, "en caso de haber ingresado (el submarino) en espacios soberanos argentinos, sería un hecho sin precedentes en nuestra historia, implica una acto de extrema gravedad para todos los Estados de la región".

Por otro lado, Melella alertó sobre "la cooperación recibida por aviones británicos con base en las Islas Malvinas mencionándolas como 'territorio independiente británico'", lo que explicó es una "acción contraria a las resoluciones de la ONU y a la posición oficial del Gobierno de EEUU".

"Manifestamos nuestra más extrema preocupación por este accionar inaceptable no solo para nuestra Provincia y nuestro País, sino para todos los ciudadanos del mundo que luchan contra el colonialismo y por vivir en un mundo sin armas nucleares", resumió el gobernador.