Desde el primero de marzo pasado y hasta ayer el colegio secundario 5235 “Misión Wichí”, de Rivadavia Banda Sur (en el departamento Rivadavia), se encuentra sin funcionar. Desde el primer día de clases y tras las advertencias de la comunidad educativa que se habían realizado un año atrás, decidieron tomar la institución por falta de nombramiento de ordenanzas.

El pedido de los padres y madres de los 236 alumnos que asisten al establecimiento se da en el marco de la necesidad de contar con personal de servicios generales para mantener la limpieza necesaria, más aún durante la pandemia. Presuponían que en el 2020 se habían iniciado las gestiones para nombrar alguien en el cargo, dado que ya en aquel año se había realizado una protesta por la misma situación.

Desde el Ministerio de Educación, el director de Nivel Secundario, Gabriel Tejerina, indicó que el año pasado se hicieron desde la Dirección a su cargo todas las tramitaciones para la designación del personal solicitado. Actualmente, sostuvo, las actuaciones se encuentran en manos de la Secretaría de Administración y Control de Procesos del Ministerio de Educación.

Ante la imposibilidad de dictar las clases de manera presencial, los manifestantes tenían la información de que desde la Dirección del Colegio se había ordenado a los docentes impartir las clases de manera virutal. “Pero hasta ahora no hay nada de eso. Los chicos dicen que no pasa nada. Además acá la señal para Internet es mala y se corta”, dijo a Salta 12 uno de los vecinos que se encuentra en la toma de la institución.

Hace más de una semana, en el marco de las protestas que generó en el paraje Santa Rosa (del mismo municipio) la muerte de un bebe de 4 meses por presunta mala praxis, el ministro de Salud, Juan José Esteban, se había comprometido con los manifestantes a realizar las gestiones pertinentes ante el Ministerio de Educación. Pero hasta el momento no hubo respuestas oficiales desde esa cartera al pedido de ordenanzas

Por su parte, el intendente de RBS, Leopoldo Cuenca, había ofrecido la posibilidad de pagar a los trabajadores de Servicios Generales para garantizar el mantenimiento de la institución. Pero el pago se haría a través del plan Potenciar Trabajo. Quienes actualmente se hacen cargo de los trabajos rechazaron la posibilidad. 

“Pasa que cuando éramos chicos e íbamos a la escuela, había una señora que estaba cocinando y se volcó agua hirviendo en los pies. Ella tenía el Plan Jefes y Jefas y cuando pasó eso se tuvo que ir a su casa. No le dieron cobertura y no la nombraron nunca”, contó Jacobo, otros de los vecinos, al explicar la razón de la negativa de los ordenanzas a trabajar bajo una modalidad de contrato precario.

Por el momento, la comunidad continúa a la espera de respuestas y afirman que el terreno que rodea al colegio tampoco fue acondicionado para que vuelvan las clases y está con pastos y malezas muy crecidas.