San Lorenzo irá este martes por su milagro futbolístico para seguir con vida en la Copa Libertadores y meterse de lleno en la fase de grupos: desde las 21.30, buscará convertirle tres goles (como mínimo) al Santos subcampeón de América, en Brasil, para continuar en el certamen más importante del continente.


El conjunto de Diego Dabove, de franca remontada tras un primer tiempo de su ciclo algo irregular, tendrá en la noche brasileña la oportunidad de entregarse a la heroica y a un juego que no admitirá especulación. El Ciclón no maneja margen de error: luego del 1-3 sufrido la semana pasada en el Nuevo Gasómetro -que terminó con un resultado más generoso para los brasileños que lo que se reflejó sobre el campo de juego-, necesita una goleada en el estadio "Mane Garricha" para continuar en la Libertadores. Tendrá que hacer al menos tres (siempre y cuando no reciba en su propio arco) y, si se repite el marcador de la ida, habrá penales para definir al clasificado.

Quienes visten su corazón futbolero con los colores azulgranas, bien saben que tienen de qué aferrarse para soñar con seguir con vida. Por caso, en la Libertadores 2014 que posteriormente ganó, el Ciclón estuvo obligado a golear a Botafogo en el Nuevo Gasómetro en la última fecha de la fase de grupos, instancia en la que consiguió un sufrido 3-0 y avanzó a la ronda final.


Frente a la necesidad de un resultado abultado a su favor, Dabove pondrá en cancha desde el inicio, por primera vez en esta Copa, a los hermanos Romero, artífices de los mejores momentos del equipo en el partido de ida. En el Nuevo Gasómetro, Angel fue titular y autor del único gol azulgrana, mientras que Oscar ingresó en el primer tiempo cuando se lesionó Julián Palacios -el marcador arrojaba un 1-0 a favor del Santos- y entregó destellos de fútbol que estuvieron cerca de empatar la historia en el primer encuentro.

Las dos modificaciones restantes en el equipo serán los ingresos de Federico Gattoni por el lesionado Diego Braghieri en la defensa y de Nicolás "Uvita" Fernández por Franco Troyansky en el ataque. El arquero Sebastián Torrico, figura sanlorencista que bien conoce de hazañas, volverá a concentrarse después de cinco meses tras una operación en el hombro derecho y será parte de la delegación en Brasilia.


Enfrente estará, claro, ni más ni menos que el subcampeón de la Libertadores, el Santos que ahora comanda el argentino Ariel Holan. El equipo paulista recuperará en su formación a dos atacantes titulares en la campaña copera 2020: el venezolano Jefferson Soteldo, que ingresó para los minutos finales de la ida, y Kaio Jorge, quien no viajó a Buenos Aires por una molestia muscular. En sus lugares, saldrían Lucas Braga y Marcos Leonardo.

¿El premio a la hazaña? Quedarse en la Libertadores, como parte del Grupo C que encabeza Boca junto a Barcelona de Guayaquil y The Strongest de La Paz. El perdedor, por su parte, se sumará al Grupo A de la Copa Sudamericana junto a Rosario Central, Huachipato de Chile y 12 de Octubre de Paraguay.


Los de Dabove remontaron su presente en la Copa de la Liga, donde vencieron el viernes a Platense por 4 a 2, cuando sumaron su tercer triunfo al hilo para ubicarse terceros en la Zona A. En Brasil, la última vez que San Lorenzo ganó por tres goles fue el 3 de mayo de 2017: con una victoria por 3-0, superó a Athletico Paranaense en el Arena da Baixada por la instancia de grupos de la Libertadores, con tantos del chileno Paulo Díaz, Nicolás Blandi y Rubén Botta.

Con ese envión del presente que parece mejorar, con aquel antecedente y además con el recuerdo fresco de la épica que mostró River cuando casi consigue su milagro futbolístico ante Palmeiras, los corazones azulgranas se ilusionan con lo que pueda entregar el equipo de Dabove y se aferran a su historia de hazañas, porque el sueño es quedarse en la Libertadores y porque saben que en el fútbol lo único que debiera ser imposible es no animarse a soñar.