El viaje a Europa que comenzará este domingo, en el cual el presidente Alberto Fernández estará acompañado por el ministro de Economía, Martín Guzmán, tiene fuertes objetivos en el plano económico. Uno de ellos es buscar acuerdos en los distintos países que visitarán --Portugal, España, Francia e Italia-- para la negociación con el FMI y otro, lograr postergar un vencimiento de un crédito de 2500 millones de dólares con el Club de París que por el momento tiene fecha para fines de mayo. En diálogo con Página/12 fuentes del Ministerio de Economía apuntaron que la postura de Guzmán, en relación a la celeridad de los acuerdos, es clara: "buscamos un acuerdo que le haga bien a la Argentina y no un acuerdo rápido".

Un dato relevante en ese sentido es el proyecto que presentó un grupo de setenta legisladores demócratas en la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, en el que solicitaron que la Casa Blanca exija al FMI suspender los pagos de deuda de los países que negocian pasivos, entre los que se encuentra Argentina, hasta que termine la pandemia de coronavirus.

A esto se suma que nuestro país recibirá este año fondos por parte del FMI denominados Derechos Especiales de Giro (DEG) que el organismo entregará a sus países miembro para enfrentar la pandemia. Se trata de unos 4.700 millones de dólares, ya que el organismo otorgará en total 650.000 millones de dólares y la participación de la Argentina en en el Fondo es del 0,67 por ciento del total. Se estima que este desembolso llegará en el mes de agosto, cuando se cumplan los requisitos formales pertinentes para su definición en el organismo internacional. 

La bancada del Frente de Todos en Senadores, en ese sentido, presentó un proyecto en el que solicitan que los DEG se utilicen para financiar la puesta en marcha de políticas públicas tendientes a resolver los graves problemas derivados de la pandemia de COVID 19 en relación a la salud,  a la reducción de la pobreza, a educación, vivienda, generación de trabajo, entre otros. El proyecto va acompañado por el pedido de que no exista la posibilidad de que esos fondos se usen para pago de intereses de deuda. Esto sería posible si las condiciones de las nuevas facilidades crediticias respetan lo que se plantea desde la propia formulación de la propuesta: que sean fondos destinados a ayudar a enfrentar la pandemia.

Club de París

En mayo cae uno de los vencimientos con el Club de París. Según fuentes del ministerio de Economía, lo que el ministro Guzmán hizo durante el viaje anterior fue cosechar apoyos y generar entendimientos con los países más poderosos de Occidente, miembros del FMI y en los que también están los acreedores del Club de París. Según evaluaron desde la cartera, el objetivo del viaje anterior se logró y en esta nueva gira el Gobierno buscará llevar los acuerdos a un nivel presidencial y profundizar los vínculos. 

Durante su viaje a mediados de abril por Alemania, Francia, Italia y España, Guzmán se reunió con el presidente del Club de París, Emmanuel Moulin, y le solicitó, ante la proximidad de los vencimientos en mayo, la posibilidad de que exista un puente de tiempo para que Argentina pueda estirar el plazo para negociar. Según señalaron desde la cartera, se logró conseguir un entendimiento y los interlocutores del organismo expresaron que iban a realizar una reunión para transmitir esta idea al resto de los miembros del organismo para tener una devolución, que estiman conocerán durante esta gira. En el entorno de Guzmán destacan que lo fundamental es que se logró presentar esta propuesta, que fue escuchada y tenida en cuenta. Solo resta ver los resultados y esperar que los vencimientos de mayo puedan postergarse, al menos, un par de meses más.

Con el FMI

Otra de las tareas que ocupa a Guzmán es la posibilidad de negociar un mecanismo similar a las denominadas "cláusulas gatillo" para cerrar ahora un programa del FMI y, si más adelante el Fondo introduce cambios en sus estatutos que mejoran las condiciones para países deudores, Argentina pueda saltar a un nuevo programa para acceder a los beneficios. 

Actualmente los programas que existen en el FMI son dos: el stand by --el acuerdo con el Fondo que hizo el ex presidente Mauricio Macri por 57 mil millones de dólares y de los cuales se desembolsaron unos 44 mil-- y el de facilidades extendidas que, según sus estatutos, da un plazo de diez años para pagar la deuda. 

Es muy difícil que el Gobierno argentino logre modificar en el corto plazo las condiciones o los estatutos de estos programas, que tienen más de 70 años y tener, de ese modo, más tiempo para pagar. Por ende, la idea del ministro Guzmán es por un lado avanzar y tratar de cerrar un acuerdo en el marco del programa de facilidades extendidas, y por otro trabajar en modificaciones de la arquitectura financiera. 

Si eso se logra, el objetivo es que el país pueda adoptarlos. Se trata de una suerte de letra chica que le permitirá al país tener los beneficios de un cambio en los estatutos en el futuro, aunque ya hubiera firmado los acuerdos.