Pese a que la pandemia de coronavirus puso en jaque a todo el sistema educativo, las matrículas de las universidades argentinas crecieron 5,3 por ciento durante el 2020, con relación al año anterior. Es decir que actualmente el sistema universitario cuenta con más de 2,3 millones de alumnos. “La universidad argentina sigue llegando a sectores que en otros países no llega”, destacó el secretario de Políticas Universitarias, Jaime Perczyk.
De acuerdo a un relevamiento del Ministerio de Educación nacional, el año pasado se inscribieron 100 mil estudiantes más en las casas de estudio de todo el país. Del informe también se desprendió que casi el 80 por ciento de los alumnos eligió a la universidad pública para cursar su carrera. En cuanto a las tareas pendientes para mejorar el acceso a las universidades, desde la cartera de Educación resaltaron que una de ellas es la falta de conectividad.
Los datos se desprenden de la “Síntesis de Información Universitaria 2019-2020”, el informe que elaboró la Secretaría de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación de la Nación. Se tratan de los últimos datos disponibles del sistema universitario argentino que contiene información e indicadores básicos sobre las instituciones universitarias; la población estudiantil de pregrado, grado y posgrado, como así también las ofertas académicas para la totalidad del sistema universitario, entre otros temas.
De acuerdo al relevamiento, el sistema universitario cuenta con un total de 2.343.587 alumnos para las 11.245 carreras de pregrado, grado y posgrado que se dictan en las 131 universidades públicas y privadas radicadas a lo largo y ancho del país. Esto significa que, pese a la pandemia, la Argentina continuó con el crecimiento de inscriptos: un aumento de más de 100 mil nuevos alumnos en comparación a los números del informe anterior.
“Muestra que la universidad argentina en general, y pública en particular, sigue creciendo y llegando a sectores sociales que en otros países no llega”, sostuvo Perczyk, sobre los resultados del documento. En este sentido, destacó al Suplemento Universidad que el 79,6 por ciento de los alumnos cursan sus estudios en la universidad pública.
A pesar del panorama adverso a causa del coronavirus y la recesión económica, para el secretario de Políticas Universitarias no fue una sorpresa el crecimiento de anotados en las casas de estudio. Esto se debe a que “la matricula educativa en general, y universitaria en particular, va contra los ciclos económicos y sociales”.
“Cuando hay dificultades sociales y económicas, contrariamente a lo que uno se imaginaría, ocurre un aumento en la matricula. Los sectores populares ven que no es momento de perder tiempo”, detalló en dialogo con este medio el ex rector de la Universidad Nacional de Hurlingham.
De hecho, el informe reveló que entre 2010 y 2019 el sistema universitario argentino registró un crecimiento del 27,3 por ciento en la matrícula de estudiantes de pregrado y grado, junto a un incremento del 43,6 por ciento de nuevos inscriptos y un aumento del 36,7 por ciento en sus egresados.
Opción por la ciencia y tecnología
Otro dato importante que rescató el funcionario es que “el 23,2 por ciento de los inscriptos optan por carreras vinculadas a la tecnología y la ciencia”. Sin embargo, a diferencia de la tendencia general, este indicador sufrió un fuerte retroceso en los últimos años.
Por ejemplo, en el informe del periodo 2015-2016 se llegó a la cifra récord de 30 por ciento de inscriptos en las carreras tecnológico-científicas, pero durante los años siguientes ese porcentaje comenzó a bajar rápidamente: 29 por ciento en 2017, 24 por ciento en 2018 y 23 por ciento en 2019. El 2020 fue el primer periodo en cuatro años que retomó la senda alcista.
Respecto a las razones de este aumento, el funcionario consideró que se debe a las “señales políticas muy fuertes” que existen a favor de este tipo de carreras desde el gobierno nacional, como así también a “estímulos económicos” y “reconocimiento social”.
El secretario de Políticas Universitarias también se hizo eco de otro dato que se desprende del informe: el 58,2 por ciento de la población estudiantil son mujeres. De hecho, la tasa de egreso también es mayor en las mujeres que en los varones, ya que alcanza el 61,2 por ciento de los egresados.
De cara al informe para el periodo 2020-2021, el ex rector se mostró optimista y aseguró que “los indicadores van a dar bien”, en cuento a la matrícula. Sin embargo, pese al pronóstico favorable para este año, reconoció que el sistema educativo universitario “ha perdido chicos que hay que ir a buscar”.
A pesar de que la dificultad económica “ha sido imposible de resolver” para muchos estudiantes, para el funcionario no es la variable preponderante que explica el abandono universitario durante el 2020. “Me parece que la conectividad es un tema fundamental en esto. Es cierto que en algunos casos la situación económica ha sido imposible de resolver, pero me parece que la falta de conexión es un determinante muy claro de la desigualdad”, sostuvo Perczyk.
Por otra parte, esta nueva edición de la “Síntesis de Información Universitaria” también incluyó por segundo año consecutivo el indicador “Tasa de Cambio entre Ofertas Académicas”, junto a una nueva variable complementaria. Los resultados de este nuevo parámetro mostraron que el 61,6 por ciento de los alumnos que ingresan a primer año continúan en la carrera que eligieron. Y del 38,4 por ciento restante, el 22,7 cambia de oferta académica dentro de la misma casa de estudio.
“Este indicador resulta relevante dado que aporta una nueva mirada sobre el comportamiento de las/os estudiantes durante los primeros años de sus trayectorias universitarias, en las que se observa que el cambio de carrera es un comportamiento frecuente y que esto no implica la deserción del sistema”, concluyó el informe.