A lo largo de 2020 el Gobierno otorgó asistencia y financiamiento a pymes por más de 100 mil millones de pesos con el objetivo de apuntalar la actividad en medio de la pandemia. En 2021, se habilitaron líneas de crédito por otros 50.000 millones de pesos a través de 25 bancos públicos y privados.

Matías Kulfas, el ministro de Desarrollo Productivo, participó del Día de las Pymes: “En estas empresas está el corazón productivo de la Argentina. Estamos poniendo todos los instrumentos del Estado a disposición para que vuelvan a ponerse de pie, a crear empleo de calidad, a exportar, y devolverles su dinamismo y su fuerza creativa. Queremos que las pymes sean las grandes protagonistas de esta recuperación productiva en cada rincón del país”.

Una de las medidas que tomó su cartera fue la creación del Fogar -un fideicomiso que otorga garantía a las pymes, permitiéndoles reducir fuertemente el costo de  financiamiento-, el cual tuvo un presupuesto en 2020 de 93.900 millones de pesos, 86 veces más que lo ejecutado en 2019. Esto permitió otorgarles respaldo a 57.000 pymes y 564.000 monotributistas y autónomos. En 2019, además, el Fogar solo había otorgado respaldo a 1600 pymes. En 2021, en tanto, ya lleva respaldadas 3252 garantías por 2.744.130.986 pesos. Por otro lado, el presupuesto del Fondep se multiplicó por 14: pasó de 2200 millones de pesos en 2019 a más de 32 mil millones en 2020. Esto permitió otorgarles créditos a 64.000 pymes y 564.000 monotributistas y autónomos, según el Ministerio de Desarrollo Productivo.

En este sentido, Leo Bilanski, presidente de la Asociación de empresarios y empresarias nacionales (ENAC), explicó a PáginaI12 que “venimos de la primera pandemia amarilla que nos dejó con 25 mil pymes menos y una Argentina en recesión económica. El último mes de 2019 y los primeros meses de 2020 empezamos con una reactivación que vio su fin cuando el 20 de marzo se decretó la cuarentena estricta. En este sentido nosotros revelamos que solo el 9 por ciento de las empresas estaba funcionando”. “La economía -agregó- se paró por un instante hacia fines de marzo de 2020 y con el pasar de los meses fue retomando su nivel de actividad, hasta encontrar un esquema de reactivación en el último trimestre del año pasado."

Según un informe de ENAC, un 69,34 por ciento de las empresas industriales pymes, es decir 7 de cada 10, retomó niveles normales de actividad por encima del 60 por ciento durante el último trimestre de 2020, superando la pandemia y al año 2019. Respecto a otros sectores pymes, la capacidad operativa promedio, en ese momento, fue del 52,58 por ciento, lo que refleja la reactivación del sector empresarial y productivo.

El ATP fue la política más importante desde el retorno de la democracia, alcanzó a 300.000 pymes, sin eso hubiéramos perdido 1000 pymes el año pasado. Fue la barrera de contención para que no haya un cierre generalizado de empresas”, destacó Bilanski.

En la emergencia sanitaria, el 90 por ciento de las pymes recibieron ATP, también créditos a tasa cero y se dispusieron 12 líneas de financiamiento a tasas subsidiadas durante 2020., Se otorgaron préstamos a empresas, monotributistas y autónomos un total de 655.247 beneficiarios.

“Lo que quedó pendiente es un financiamiento no bancario para las pequeñas empresas que no operan con los bancos. Cuando se habla de créditos bancarios se está dejando por fuera a una gran mayoría de empresas que no usan ese canal. Si bien el Fondep lo intentó, todavía no lo logró” concluyó Bilanski.