Un libro que se va abriendo camino de boca en boca es Lost in translation, de la diseñadora británica Ella Frances Sanders. La autora -que también se encarga de los dibujos de este ejemplar adorable, que aquí se consigue a través de la editorial El zorro rojo- ha recopilado palabras intraducibles en idiomas de todo el mundo. Es el caso del término sueco “mangata”, que significa “reflejo de la luna en el agua, como un camino”. O de la expresión japonesa “wabi-sabi”; esto es, “encontrar belleza en las imperfecciones”. Y también, de la palabra inuit “iktsuarpok” que se sitúa “en algún lugar entre la impaciencia y la anticipación”. Significa el “sentimiento de que mientras esperas a alguien que no llega, te apremia a salir y regresar”.

La Feria del Libro de Buenos Aires (que ya va por su edición 43ª) puede producir algo parecido a “iktsuarpok”. Y es que esos 45 mil metros cuadrados donde se multiplican 1.500 expositores con libros de unos cuarenta países, pueden provocar algo similar al mareo por su desmesura. Es posible que en cierto momento, cualquier lector/x curiosx se sienta abrumadx y no sepa si salir corriendo o regresar armadx de paciencia para encontrar algunos tesoros.

Gabriela Wierner

LA PISTA DEL FEMINISMO

Una clave consiste en saber qué se busca. Las12 se metió en la Feria del Libro con la idea de rescatar textos escritos por mujeres desde una mirada desprejuiciada, que deconstruya estereotipos, que sea capaz de incomodar con sus preguntas e incluso que incorpore todo nuestro potencial político en clave feminista. Se trata, en definitiva, de seguir el rastro luminoso que implantó Luisa Valenzuela en el discurso inaugural de la Feria este año. Allí señaló que en la era de la posverdad -”esa ‘mentira emotiva’ nacida para modelar la opinión pública desdeñando los hechos fehacientes y los datos verificables”, según explicó- las mujeres, desde las Madres de Plaza de Mayo hasta acá, hemos demostrado nuestro enorme coraje y creatividad al implantar nuestra voz pública y colectiva. 

Durante años, la británica Angela Carter se dedicó a recopilar cuentos de hadas, todos protagonizados por mujeres y alejados de la idea descafeinada de las haditas buenas para niñxs ídem. Aquí hay sangre, humor, sexo y muerte. El volumen -llamado Cuentos de hadas y editado por Impedimenta- se puede encontrar en Waldhuter (stand 410, sector azul). Allí también hay libros raros de editoriales extranjeras, que en general rondan los 400 pesos. Es el caso de La caja de los deseos, que reúne la obra en prosa de Sylvia Plath (editorial Nórdica). También, de la traducción española de La mala feminista, de la norteamericana Roxane Gay, un compilado delicioso de artículos que trabaja desde el sexismo en el lenguaje hasta las zonas más políticamente correctas de Orange is the new black, sin obviar una cantidad de violencias físicas y simbólicas con las que la cultura patriarcal pretende moldear nuestros cuerpos y nuestra subjetividad. En el mismo stand hay ensayos sobre porno feminista y libros flamígeros con la historia de movimientos como WITCH, en Estados Unidos, a fines de los sesenta.

Recién editado, es imprescindible La guerra contra las mujeres, de Rita Segato, que reúne textos y conferencias desde 2006 hasta 2016. “Lejos de ser residual, minoritaria y marginal, la cuestión de género es la piedra angular y eje de gravedad del edificio de todos los poderes”, afirma esta lucidísima antropóloga en un volumen coeditado por Tinta Limón y Traficantes de Sueños. Se consigue en Todo libro es político (stand 2020, sector amarillo). Allí también se puede adquirir el flamante Mujer basura: performance y feminismo, de la editorial Milena Caserola, con las intervenciones que la artista Paula Naamin Telis hizo durante diversas marchas de mujeres en Buenos Aires y el catálogo completo de Madreselva, una editorial independiente que trabaja en la zona del feminismo y los estudios queer. Estos libros oscilan entre los 150 y 300 pesos.

Karen Luy de Aliaga

LA INFANCIA DIVERSA

Otro de los hilos de Ariadna de esta feria es la enorme cantidad de literatura infantil y juvenil que cuestiona los mandatos sociales a través de libros-objeto hermosos. Es el caso de La historia de Julia, la niña que tenía sombra de niño, de Christian Bruel y del novísimo Cuando estamos juntas, escrito e ilustrado por María Wernicke, donde se cuenta el vínculo de una hija con su madre cuando ésta es encarcelada por reclamar por sus derechos laborales. Estos libros se encuentran en Calibroscopio (stand 522, sector azul). También es un hallazgo la reedición de los libros de la italiana Adela Turin, que a mediados de los setenta se ocupó de la igualdad de género a través, por ejemplo, de la historia de una tortuga que abandona a su marido tortugo cansada de sus maltratos en Arturo y Clementina o de una elefanta que no quiere ser rosa como la obliga su padre en Rosa caramelo. Estos textos ilustrados fueron reeditados por Kalandraka y se consiguen en Iamiqué (stand 622, sector azul). 

CHICS ON COMICS

Para lxs amantes de los cómics, el nombre de Marjane Satrapi (autora de Persépolis) o de Alison Bechdel (autora de Fun home, donde cuenta cómo se empezó a enamorar de chicas mientras se hacía cargo de la funeraria de su padre) son clásicos. Sus libros están en La revistería (stand 173 y 231, sector azul) junto a otros como La muñequita de papá, donde Debbie Drescher revela un abuso en clave autobiográfica. También se recomienda una visita por el sector que comparten Moebius y Limonero (stand 2123, sector amarillo) porque allí hay mucho de nueva historieta hecha por chicas como Tan tan grande, de la portuguesa Catarina Sobral o el libro con recetas de cocina que compiló y dibujó Josefina Jolly. En el stand de Santa Fe (3014, sector ocre) se consigue el fanzine Crisis capilar, de la talentosísima Jazmín Varela, donde la artista despliega más de veinte retratos de mujeres, desde la que dice “a veces me siento invisible” a la que, liberada, es capaz de reconocer “todo me chupa un huevo”.

Rita Segato

LA INTERNACIONAL LITERARIA

De hecho, los sectores destinados a provincias y países también tienen su encanto. En Brasil (stand 1914, sector amarillo) se consigue la autobiografía de Rita Lee y en Uruguay, la obra reunida de la poeta Circe Maia (stand 1600, sector amarillo). En Estados Unidos (stand 1809, sector amarillo) están disponibles para consulta los libros de Ana Castillo, poeta, narradora y activista americana de ascendencia mexicana, otra de las invitadas extrajeras más interesantes de la Feria. “Antes/ que el vientre/ de la madre,/ fue la libertad salvaje/ de la madreselva.// Regresemos al origen/ para elegir de nuevo.// Aún existe una oportunidad /para ser dioses”, escribió Castillo. En ese sentido, uno de los aspectos destacables de este megaespacio es la posibilidad de descubrir voces que rara vez se editan aquí. Por eso es muy bienvenido el stand Editores Independientes de Perú (2121, sector amarillo) donde se pueden encontrar libros con textos raros de Gabriela Wiener y también, de Karen Luy de Aliaga y de Gloria Portugal, todos editados por Paracaídas, que hacen foco en escritura de mujeres. Luy es autora de 2472 kilómetros al norte, una suerte de road movie de dos chicas que viajan por la costa peruana y Portugal, una de las voces más novedosas de la poesía peruana, deslumbra con Estrellas en el cielorraso, con versos sobre familias disfuncionales. Estos textos cuestan entre 150 y 200 pesos.