Los talibanes reprimieron con gas lacrimógeno y disparos al aire una marcha de mujeres en Kabul, la cuarta movilización encabezada por afganas que reclaman su inclusión en el próximo gobierno de Afganistán. Los insurgentes todavía no anunciaron cómo estará conformado el gabinete, aunque en la semana uno de los líderes aseguró que “podría no tener mujeres” al frente de los ministerios. Este sábado aterrizó un avión proveniente de Qatar con un equipo técnico que estará encargado de poner en funcionamiento el aeródromo Hamid Karzai, donde ya operan vuelos nacionales. En el valle de Panshjir continúan los enfrentamientos entre los rebeldes afganos y los combatientes talibanes.

Gases lacrimógenos y disparos al aire

Un grupo de mujeres fueron reprimidas por los combatientes talibanes. Las manifestantes reclaman sus derechos básicos a trabajo y estudio, así como su participación en el gobierno. La movilización que empezó en el ministerio de Relaciones Exteriores se dirigía hacia la casa presidencial en Kabul, sin embargo, los insurgentes usaron gas lacrimógeno para detener el avance de las activistas . "Nos impidieron continuar la marcha y dijeron que no está permitido ir hacia la puerta del Palacio Presidencial", dijo una de las organizadoras de la protesta, que pidió el anonimato. "Usaron disparos y gases lacrimógenos para dispersarnos, incluso si cinco mujeres se reúnen en un lugar para protestar las dispersan", agregó.

Otra de las participantes, Razia Barakzai, de 26 años, dijo a la cadena qatarí, Al Jazeera, que los combatientes llegaron armados y las rodearon para impedir que continuaran su marcha. "Estuvimos tranquilas y pacíficas todo el tiempo, pero sólo querían detenernos a cualquier precio", afirmó. Barakzai también contó que los insurgentes les ordenaron "vuelvan a casa, cada una de ustedes, una por una" a pesar de que seguían rodeándolas."Era extraño, no querían que nos quedáramos, pero tampoco nos dejaban salir", añadió.

Es la segunda movilización de mujeres en la capital afgana. "La protesta de hoy estuvo en línea con la protesta de ayer para pedir a los talibanes que le den a las mujeres una participación significativa en todos los aspectos de la vida, incluida la toma de decisiones y la política", explicó Samira Khairkhwa, otra de las organizadoras de las protestas que insistió continuarán "hasta que los talibanes acepten nuestras demandas, no nos quedaremos calladas ni nos encerraremos en las casas".

Una manifestante que también participó en la marcha fue golpeada por los combatientes, según informó Sharif Hassan corresponsal del diario estadounidense The New York Times que compartió en redes sociales imágenes de la activista con el rostro ensangrentado.

Mientras que al sudoeste del país, un grupo de mujeres salió a las calles de Zaranj, capital provincial de Nimruz, para exigirle al régimen talibán que garantice sus derechos básicos, según consignó en su cuenta de Twitter, Ezzatullah Mehrdad, corresponsal del matutino norteamericano The Washignton Post.

La directora ejecutiva de ONU Mujeres, Pramila Patten, explicó esta semana que la incorporación de mujeres en la futura administración será una "prueba de fuego" para constatar el verdadero compromiso de los talibanes con los derechos y las libertades.

El último bastión anti-talibán

Los insurgentes volvieron a postergar el anuncio de su gabinete mientras intentan vencer el último bastión anti-talibán en el valle de Panshjir, donde el viernes los talibanes habían declarado su victoria. Sin embargo, el exvicepresidente del depuesto gobierno afgano, Amrullah Saleh, que tras la toma de Kabul se proclamó presidente, afirmó que la resistencia “continuaba y continuaría”. Ahmud Masud, hijo del comandante Ahmed Masud, asesinado en 2001 por Al Qaida, descartó la posibilidad de diálogo con los insurgentes. Según Masud los talibanes han “elegido el camino de la guerra”.


Reapertura del aeropuerto

Mientras que dos personas murieron y veinte resultaron heridas por los disparos al aire que descargaron los talibanes en celebración de la retirada de Estados Unidos tras 20 años de invasión. El vocero de los insurgentes, Zabihullah Mujahid, llamó a que los combatientes dejen de “disparar al aire” y “en lugar de ello, den gracias a Dios”.

En tanto la monarquía del Golfo Pérsico en Qatar, la sede de diálogos entre los talibanes, el gobierno estadounidense y el depuesto gobierno de Ahshraf Ghani en los últimos tres años, anunció la reapertura parcial del aeropuerto internacional de Kabul para reanudar los vuelos con ayuda humanitaria para Afganistán.

El embajador de Qatar en Afganistán, Said Mubarak al Jayarin, aseguró que un equipo técnico de su país continuará trabajando para que “pronto puedan estar operando vuelos internacionales comerciales” que también permitiría la salida de ciudadanos extranjeros y afganos que no pudieron ser evacuados antes del 31 de agosto.

Un portavoz de los talibanes, Bilal Karimi, aseguró que también fueron reanudados los vuelos nacionales, que fueron paralizados tras la toma de Kabul, que desde el 15 de agosto sólo operó vuelos de evacuación. "Los dos primeros vuelos nacionales despegaron hoy del aeropuerto de Kabul", afirmó Karimi, que también subrayó que falta mucho trabajo técnico para que el aeropuerto pueda operar vuelos nacionales e internacionales.

"Esperamos que todo el trabajo técnico se complete pronto, que los problemas se resuelvan pronto y que el aeropuerto esté listo para todos los vuelos nacionales e internacionales", concluyó. Un empleado de la aerolínea afgana Kam Air, que pidió reservar su nombre, aseguró que el aeródromo Hamid Karzai está listo para vuelos nacionales. “Nos estamos preparando para organizar los demás vuelos”, confirmó al tiempo que señaló que las oficinas de la aerolínea no están abiertas pero que pronto esperan volver a la normalidad.

Los insurgentes también reabrieron la bolsa de valores más grande del país, cerrada desde la toma de poder de los talibanes. "El mercado de Shahzada se abrió hoy para las operaciones de cambio y los empresarios”, anunció hoy el portavoz oficial de los talibanes Zabiullah Mujahid, en un comunicado.