Desde el anuncio de un golpe de Estado hasta críticas de todo tipo hacia la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y el presidente Alberto Fernández: el menú de respuestas de Juntos por el Cambio a la presentación en masa de cartas de renuncia en el gabinete nacional fue surtido. No hubo un discurso único y en cambio se hallaron respuestas de lo más variadas, y hasta contrapuestas. En esta ocasión, los dirigentes de la coalición opositora podrían haberse quedado sentados y con el pochoclo a mano, pero eligieron ventilar sus discusiones en público. Por ejemplo, hubo polémicas sobre qué papel deben jugar para mantener la estabilidad democrática que se ventilaron en las redes sociales: el segundo en la lista de María Eugenia Vidal, Martín Tetaz, cuestionó a Gerardo Morales por decir que había que "acompañar al Presidente". "Es un día complicado para estar en internas", lo ubicó el gobernador de Jujuy.

El interbloque de Diputados de Juntos por el Cambio amagó con sacar un comunicado, pero finalmente dieron marcha atrás para "no echar más leña al fuego". Lo resolvieron en un encuentro en el despacho de Mario Negri (UCR), del que participaron Silvia Lospenatto, Miguel Bazze, Cristian Ritondo (PRO) y Juan Manuel López (Coalición Cívica), entre otros. "Que se arreglen en el Gobierno", fue la conclusión. Lo que hubo, en cambio, fue una enorme cantidad de dirigentes que salieron a decir distintas cosas sobre lo que estaba ocurriendo con el gabinete nacional.

Elisa Carrió, que no había participado de los festejos del domingo, interrumpió sus vacaciones (y se quejó por ello) para decir por radio: "Le recomiendo al Presidente resistir y evitar a un golpe, que es el preanuncio de algo más grave que le puede suceder a la sociedad argentina, cuando sectores del Gobierno se radicalizan para ir al autoritarismo. No sería bueno que él resuelva su propia disolución". Entre otras cosas, la líder de la Coalición Cívica le recomendó que le pida ayuda al gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti.

Carrió consideró que "el rol institucional en Juntos por el Cambio está en el parlamento, no en resolver problemas internos del Gobierno. La oposición sostiene la institucionalidad desde el parlamento". Y comparó la situación con la renuncia del vicepresidente Carlos "Chacho" Alvarez durante el gobierno de Fernando de la Rúa.

Por su parte, el intendente de Vicente López, Jorge Macri, salió a aclarar que “acá no hay club del helicóptero" y que no estaban buscando que se caiga el Gobierno. Mientras tanto, el ex embajador macrista Diego Guelar publicaba un tuit sugestivo: "Game over". Y las cuentas de la oposición empezaban en masa con el hashtag #Gobiernoterminado.

El cruce Tetaz-Morales

Sobre la estabilidad democrática tuvieron una discusión en público el gobernador de Jujuy y el candidato porteño Martín Tetaz. Morales había dicho previo a que varios ministros pusieran a disposición sus renuncias: “Hay que acompañar al Presidente porque en el Frente de Todos están peleados y es difícil saber quién manda”. Y Tetaz le salió al cruce: "La mejor manera de acompañarlo es contándole a la gente como será la Argentina en la que vamos a vivir a partir del 2023. Es la esperanza del cambio la que va a garantizar estabilidad suficiente para que termine su mandato, estimado ⁦@GerardoMorales".

Morales no le dejó pasar esas palabras en el día equivocado y le contestó: "Comparto, querido Tetaz, tenemos que consolidar el triunfo del domingo, pero nada más miremos lo que está pasando con las renuncias, es un día complicado para estar en internas". Lo que se conoce como ubicar a alguien en la palmera.

Tetaz luego intentó matizar su discurso: “Cuanta más inestabilidad política haya en el oficialismo, más claro tenemos que explicar y contar cómo es la Argentina en la que vamos a vivir desde 2023. La certeza del cambio es la mejor contribución que puede hacer hoy la oposición”.

En el medio, pasó festejando el candidato Fernando Iglesias: "Qué pasa, qué pasa, qué pasa, General? Está lleno de gorilas el gobierno popular! #LaLocuraEsTotal". En la misma boleta va Paula Oliveto, de la Coalición Cívica, que cuestionó: "Que vergüenza. En este momento de crisis el Gobierno tira nafta al fuego. El kirchnerismo le hace daño a la Argentina". "No se confundan, nadie renunció de manera indeclinable. Están apretando a Alberto para sacar a los ministros que no quiere Cristina", insistió luego. Y al final: "Ojo, Alberto no es víctima. El aceptó la Presidencia bajo la conducción de Cristina". Oliveto es cercana a Carrió, quien dijo que Fernández era víctima de un golpe o estaba por serlo.

En cambio, Graciela Ocaña --segunda de Diego Santilli en la boleta bonaerense-- pidió que renuncien de verdad: "En un país serio las renuncias son indeclinables. Dejen de lado el ajedrez interno. Se están matando por ver quién tiene el poder y en medio están los argentinos. No escucharon el grito de las urnas. La gente pide que solucionen sus problemas. ¡No generen una crisis institucional!".

"En estado de desesperación hacen cualquier cosa. Cuidado muchachos que en el medio está un país. El nuestro!", afirmó Fernando Sánchez, también desde la boleta de Vidal.

En cambio, el jefe de bloque de PRO, Cristian Ritondo, prefirió no hablar del tema, ante la consulta de este diario: "Nosotros no tenemos nada que opinar de la crisis de ellos. Nosotros el domingo logramos más republica y el Presidente tiene que gobernar", aclaró.  El resto de la coalición no pensó lo mismo, y opinaron desde todos los costados posibles.