Casi dos década después, Daniel Filmus vuelve a encabezar un ministerio nacional. En esta nueva etapa, la cartera de Ciencia y Tecnología que deja Roberto Salvarezza. “Es un desafío enorme que ya me tocó asumir en el 2003 cuando fui ministro de Educación, Ciencia y Tecnología y tuvimos que reconstruir todo el aparato científico-tecnológico que había sido devastado en la década de los ‘90 y por la crisis de los 2000”, sostuvo el sociólogo a Página/12. En esta ocasión, la reconstrucción es luego “del macrismo, donde se deterioró fuertemente la inversión en Ciencia y Tecnología”, agregó.
Filmus comenzó la semana como secretario de Malvinas, Antártida e Islas del Atlántico Sur, reflexionando desde su cargo sobre los resultados electorales del último domingo en las PASO, pero celebrando la identificación de cuatro combatientes caídos en Malvinas. Y la cerró con la noticia de la nueva etapa que deberá encarar desde mañana, luego de la jura de los nuevos integrantes del Gabinete nacional.
El objetivo es claro, dice: “Articular el sistema científico-tecnológico con el modelo productivo para agregar valor al país a través del conocimiento, la innovación y el desarrollo. Y, sobre esto, continuar fomentando la investigación para atender necesidades básicas como las sanitarias que, en pandemia, se volvieron realmente urgentes".
El exsenador aseguró que tiene un ventaja sobre su predecesor en el cargo. “Tuvimos muy buenas gestiones: la de Roberto Salvarezza en el Ministerio, la de Ana Franchi en el Conicet y la de Fernando Peirano en la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación”, expresó Filmus, al destacar el trabajo realizado durante los últimos casi dos años. “Lo que tenemos que hacer es seguir fortaleciendo ese camino con una mirada muy fuerte de desarrollo con investigación de excelencia”, explicó.
En ese sentido, detalló que el trabajo del Ministerio tendrá que articular en dos sentidos. Por un lado, "con todas las otras áreas a partir del Plan 2030 que fue presentado junto con el presupuesto 2021". Y por el otro, "darle una impronta federal al desarrollo científico-tecnológico que aún es enormemente desigual”. “Hay que seguir fomentando la instalación de investigadores en el interior del país, con financiamiento mixto y definiendo las prioridades en función de cada provincia”, sostuvo.
Sin embargo, el esfuerzo más grande, señaló Fimus, estará puesto en “transformar la Ciencia y la Tecnología en política de Estado que esté por encima de los tiempos electorales, generando un núcleo de políticas de consenso entre las fuerzas políticas y sociales”.
La experiencia la tiene: como ministro de Néstor Kirchner logró que la educación volviera a tener un lugar central en el Estado. Y la reciente ley de Financiamiento del Sistema de Ciencia, Tecnología e Innovación --que establece el incremento progresivo del presupuesto del área hasta llegar al uno por ciento del PBI-- sienta un buen precedente: “Fue aprobada por unanimidad, lo que genera una plataforma para que sea política de Estado”, aseveró.
Por delante tiene, al menos, dos años de trabajo para que la Ciencia y la Tecnología argentinas vuelvan a tener el valor que requieren y merecen.
Informe: Sofía Moure