Un operativo policial se desplegó en la mañana de este miércoles en el barrio de Barrancas del Lago, en Nordelta, para dar con un ladrón que ingresó al barrio nadando, robó en dos casas y amenazó a las víctimas con un destornillador.

A pesar de que, en un primer momento, Carlos Méndez había logrado escapar terminó detenido por policías de la Departamental de Tigre de la Bonaerense, y entre sus pertenencias tenía 7.000 pesos y las joyas que sustrajo de las viviendas.

Fuentes policiales informaron que el ladrón ingresó al barrio por las aguas del corredor Bancalari, a la altura Arroyo Las Tunas.

Parte de la secuencia del robo quedó registrada en las cámaras de seguridad. Con barbijo, una mochila negra y una camiseta de Boca, Méndez aprovechó una puerta trasera abierta para ingresar por la cocina de una de las casas.

Las víctimas resultaron ser un abogado de 52 años, a quien le robó una notebook que luego descartó en el lugar, y un empleado público, a quien le sacó siete mil pesos y un reloj marca Omega. Incluso, intentó desvalijar una casa, aunque terminó huyendo.

Según relataron los testigos, Méndez intentó a escapar a nado por los lagos, pero una vez que las víctimas dieron aviso a la seguridad privada del country y a la Policía de Tigre, se inició un amplio operativo rastrillaje para localizarlo.

Los videos de las cámaras de seguridad de las propiedades asaltadas y también los de las cámaras del centro de monitoreo de seguridad de Nordelta, fueron clave para reconstruir los movimientos del delincuente, que en varios momentos de su estadía en el country se fue cambiando de ropa. "Apenas ingresó, quedó grabado cómo se cambiaba la ropa que tenía empapada. Después se fue cambiando varias veces de ropa para intentar despistar", contó uno de los investigadores.

La detención se dio a las 11.30, dos horas y media más tarde del último robo, cuando gracias al análisis de las grabaciones, se observó que de Barrancas del Lago había huido también a nado al vecino barrio El Palmar y se había refugiado en unos arbustos.

Allí, el hombre fue detenido por personal policial del Destacamento Villa La Ñata, con jurisdicción en la zona, y se le secuestró un cuchillo, un destornillador, el dinero y las alhajas robadas y un reloj marca Omega de una de las víctimas que se había colocado en la muñeca.

La causa, caratula como "robo con armas", quedó en manos de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) descentralizada de Benavídez, subrogada por el fiscal Sebastián Fitipaldi, quien mañana indagará al sospechoso.