Las mujeres desalojadas de la toma en la Villa 31 reclamarán este lunes, en el Obelisco, por el acceso a una vivienda digna. Pasaron el fin de semana repartidas en comedores populares, casas de vecinos y paradores. “Estamos con lo puesto. A todo lo que teníamos lo prendieron fuego o lo tuvimos que dejar” contó Leonela Alemán desde el galpón de Parque Roca donde fue trasladada, con sus seis hijos, por el ministerio de Desarrollo Social porteño. Allí les dieron, al llegar, “una mudita para los chicos”. Los adultos comprobaron nuevamente que un gesto vale más que mil palabras y están con la misma ropa desde el jueves.

Leonela y sus niños,  junto a otras pocas familias que también participaron de la toma desalojada a pedido del gobierno de Horacio Rodríguez Larreta, son parte de la minoría que aceptó mudarse a un parador. Otras mujeres consiguieron alojarse transitoriamente en espacios de las organizaciones populares del mismo barrio o en casas de vecinos.

El problema más urgente que mencionan es cómo continuar trabajando y la escuela. Leonela, por ejemplo, es costurera en un taller textil dentro del Barrio 31, pero el parador donde está ahora queda en Lugano. Según contó anoche, no tenía SUBE ni sabía si Desarrollo Social le iba a dar movilidad. Las otras familias que están el lugar viven de cartonear. Si bien en el parador les dan de comer, no hubo desde el gobierno una respuesta integral a su panorama de exclusión. 

Mónica Zárate, del MP La Dignidad, dio un pantallazo sobre la ausencia del estado en los días siguientes al desalojo: “Nos estamos ayudando entre todas, como podemos. Una de las pibas tuvo que volver con sus hijos a la pieza que alquilaba, donde se había quedado su ex pareja, un tipo que le pegaba. La acompañamos entre varias para que él se fuera”.

La protesta en el Obelisco fue convocada para las 10 de la mañana. Como sucede en todo conflicto colectivo, entre las mujeres y entre las fuerzas políticas que las están apoyando hay posturas distintas sobre cómo continuar el reclamo. Así la acción en el Obelisco tendrá el el respaldo de fuerzas de la izquierda, mientras que otros espacios que integran el Frente de Todos impulsarán otras actividades. 

Por otra parte, la justicia debe resolver dos denuncias contra el operativo de desalojo, una realizada por el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) y la segunda por abogados de Somos Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa.  Además, la Defensora de los Derechos de la Niñas, Niños y Adolescentes, Marisa Graham, presentó un pedido de informes ante la justicia. “Nos preocupa cuáles van a ser las soluciones habitacionales y sobre todo cómo van a hacer con los chicos, que ahora están en el Parque Roca, con sus trayectorias educativas, porque iban a la escuela cerca de donde vivían”.