El estadio de River volvió a lucir con público local luego de 582 días, por la pandemia de coronavirus que impedía la presencia de público, pero el aforo del 50 por ciento permitido por las autoridades sanitarias se vio desbordado.

La cantidad permitida de público era de 36 mil espectadores, y la cancha se vio ocupada casi en un 80 por ciento. El inconveniente surgió con los controles que se ubicaron en los molinetes. Los socios de River ni siquiera tuvieron que mostrar el documento de identidad ni los carnets para ingresar al estadio Monumental. 

Las puertas de la cancha se abrieron pasadas las 14, con controles que se fueron flexibilizando con el correr de los minutos. Muchos socios del club ingresaron con todo el protocolo correspondiente: se debía comprobar la identidad con el carnet único habilitado y el DNI, respetar los accesos de cada tribuna y, además, presentar la declaración jurada de salud y el certificado de vacunación en la aplicación Cuidar.

Sin embargo, ante la masiva cantidad de gente que se presentó al Monumental, los chequeos se minimizaron rápidamente: la gran mayoría ingresó únicamente con un control de temperatura, la verificación del DNI en el sistema Tribuna Segura, y el carnet único de la institución apoyado en el molinete. La aplicación quedó fácilmente en un segundo plano.

Se estima, más allá de que no hay números oficiales, que el aforo de público alcanzó entre un 75% y un 80%. Es decir, entre 54 mil y 57.600 personas colmaron un estadio que tiene capacidad para 72 mil hinchas, pero solo tenía habilitados a 36 mil socios con abono “Tu Lugar en el Monumental”, más los vitalicios y palquistas, para alcanzar un 50%.

Los problemas en los controles perimetrales con los molinetes fueron la clave: por momentos el sistema estaba caído, no se podían leer los carnets, y el control de Utedyc y la Policía se vio desbordada ante la cantidad de hinchas que se acercaron hasta las inmediaciones, para intentar pasar con o sin acceso permitido. De esa manera, miles de hinchas llegaron hasta el control con carnets que no estaban habilitados y terminaron ingresando aprovechando la situación.

A pesar de ello, Guillermo Madero, Director Ejecutivo del Comité de Seguridad del Fútbol del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, escribió en su cuenta de Twitter con capturas de pantalla de la cancha: “El estadio de River según sistema marca 50% de aforo y es correcto. Los hinchas tienden a juntarse por eso puede engañar alguna imagen. Cuando el estadio está al 100% solo se ven cabezas. En este caso se ven muchos espacios. No está al 70% u 80%. El Aforo se cumplió”.

La gente que estuvo en el estadio se dio cuenta de que eso no fue así. De hecho, una horas después, el propio Madero borró su publicación, ante la contundencia de las imágenes. La Fiscalía especializada en eventos masivos, a cargo de la fiscal Celsa Ramírez, le abrió un acta contravencional a River por el aforo en el Superclásico e iniciará una investigación al respecto. Se le pedirá al club cámaras de seguridad, y conteo de molinetes y carnets habilitados.