En el Paraguay y en la mujer pensó Vanina Rivarola a la hora de concebir India, sustancial y flamante disco que la cantante entrerriana se apresta a presentar este sábado 4 de diciembre a las 20 en La Usina del Arte (Caffarena 1). En el Paraguay, en la mujer y en Jorge Cafrune -sobre todo-, dado que el trabajo es una especie de relectura de Yo le canto al Paraguay, disco del inmenso barbón jujeño que este año cumple 50. “Es un homenaje a ese cantor fundamental de la tierra”, fluye de las palabras de esta directora coral oriunda de Concordia y aquerenciada en La Plata, con dos albumes más a la fecha: Romance del duraznero y Energía vegetal. “El disco, además de versionar buena parte del de Cafrune, gira en torno a mi conexión y admiración para con las cantantes paraguayas. También a la energía del pueblo paraguayo, tan alegre y aguerrido. Se trata de un repertorio que deseaba mucho cantar”, asegura.

El repertorio consta de ocho finas piezas remozadas, hechas casi a nuevo. Están varias de las que Cafrune grabó cinco décadas atrás (solo faltan “Mi dicha lejana”, “Asunción” y “Oración a mi amada”), y agrega “Dulce Paraguay”, canción de Ramón Ayala que no está en el disco homenajeado. “Paraguaya linda” luce favorecida por el aporte de Facundo Guevara, “Regalo de amor” es introducida por la voz poética de Teresa Parodi, y la antedicha “Dulce Paraguay” hace confluir a la misma Teresa con su autor. “Estéticamente, los ocho temas operan como una relectura sonora e interpretativa de canciones inmortales que marcaron mi vida. Y conceptualmente, como un redescubrimiento en obras de otros tiempos, en mensajes que hoy son más actuales que nunca, además de canciones como 'Recuerdos de Ypacaraí' (en la que interviene la cantante paraguaya Miriam Beatriz) o 'Mis noches sin ti', que para mí integran un cancionero universal que trasciende la lengua y el territorio. Este disco es libertad”, enfatiza Rivarola, cuya banda acompañante ancla en el bajo de Emiliano Navazo, y el combo guitarras-producción-arreglos que aporta Diego Rolón. “Vamos a llevar la selva y el río a la Usina”, promete.

-¿Por qué India en su doble función de nombre de disco y tema principal?

-Porque es una manera de reivindicar nuestra vertiente nativa, de dar voz a la mujer guaranítica, que habita y hace eco en otras mujeres del disco. En cuanto al tema, puntualmente, "India" es una guarania que hace muchos años canto y que en este disco despertó otras posibilidades de interpretación, dado que me dejo abrazar por lo que me propone ésta sonoridad. Imaginé a esa india montaraz y arisca, pensé en las mujeres, en cómo vamos sorteando los desafíos y seguimos soñando. “Regalo de amor” es otra de las canciones que más me emocionan, porque es una celebración de la vida, del amor, de la alegría de compartir con alguien que amamos.

-Una senda similar a la que transita la versión de hacés de “Burrerita”, la polca de Ortiz Mayans y Pérez Cardozo, inmortalizada por la voz de Cafrune: “Burrerita paraguaya / En mis versos te distingo Y te abrazo en mis estrofas / Con ardiente cunuhu”.

-Bella, sí, y con el plus de que invita a bailar en el escenario. Conmueve la historia de esta mujer trabajadora, que sale a buscar el pan todos los días, que no la detiene nada, ni la lluvia, ni la escarcha, y que es bien popular. La abrazo en mi canto y la admiro también, por supuesto.