Alfredo Cornejo pasó los últimos días de reunión en reunión para evitar que la onda expansiva de la ruptura del bloque radical en Diputados se trasladara al Senado. Después de una reunión que convocó entre las partes por la Cámara baja que terminó con gritos y vasos estallando, Cornejo buscó que el resultado no fuera el mismo con los senadores. Por estas horas, ya da por cerrado un acuerdo para que él sea el presidente del interbloque de Juntos por el Cambio, mientras que Luis Naidenoff continuará como presidente del bloque de Senadores. Así se evitará las peleas por los cargos y por la conducción que hicieron estallar el bloque de Diputados. Aún resta saber si Martín Lousteau será removido de la vicepresidencia de la Cámara alta para darle lugar a la santafesina Carolina Losada.

La discusión que enfrentó a los sectores de Mario Negri y de Emiliano Yacobitti en Diputados fácilmente podían trasladarse al Senado. El sector de Yacobitti y de Martín Lousteau consideraba que, tras perder las elecciones este año, Negri debía dar un paso al costado. Por eso, también, eligieron a Rodrigo De Loredo como presidente del nuevo bloque UCR-Evolución: es el que le ganó las PASO. Pero el planteo iba incluso más allá: buscaban señalar que los bloques deben tener "nuevas caras" y que los dirigentes no pueden perpetuarse por décadas al frente de los bloques. Incluso llegaron a armar memes comparando a Negri y a De Loredo con modelos de celulares (Negri era el modelo antiguo y obsoleto).

Lo que valía para Negri fácilmente podría trasladarse al Senado y a Naidenoff, que hace tiempo que es jefe del bloque. Pero Cornejo, que apoyó el recambio en Diputados pero no al costo de la ruptura (cabe destacar que las diputadas mendocinas se quedaron en el bloque que conduce Negri), buscó impedir que se repitiera el escenario en el Senado.

De hecho, Cornejo también intentó frenar la división en Diputados, en una reunión que terminó muy mal: Lousteau y Morales intercambiaron chicanas y el gobernador de Jujuy rompió un vaso, cuyas esquirlas le llegaron al gobernador de Mendoza, Rodolfo Suárez. La reunión terminó al instante y solo dejó más divisiones: a Lousteau, Morales lo acusó de "jugar para Larreta", y a Morales el senador porteño le enrostró "votarle todo a Alberto Fernández".  Los reproches continuaron al día siguiente sin posibilidad de vuelta atrás.

Los vasos voladores no llegaron al Senado (encima, en el caso de la Cámara alta serían vasos de whisky) porque hubo un principio de acuerdo donde todos los sectores mantienen algún cargo. Cornejo ya lanzó la fumata blanca: él presidirá el interbloque de Juntos por el Cambio (para lo que debió también buscar un consenso con el PRO, desde donde dicen que "en principio, hay acuerdo") y Naidenoff seguirá frente al bloque de la UCR, aunque desde el sector de Evolución no hubieran visto con malos ojos que él también diera un paso al costado.

Cornejo planea usar ese lugar para ganar visibilidad hacia 2023, cuando podría postularse a presidente en las PASO que -todo indica- tendrá Juntos por el Cambio. Morales es otro de los que se imagina en la Casa Rosada y, por eso, irá por la presidencia del Comité Nacional de la UCR que Cornejo está dejando. En las elecciones internas del 17 de diciembre es posible que tenga que enfrentar a Lousteau. Una victoria lo posicionará en un lugar de visibilidad también, una derrota es probable que lo saque de la carrera.

Esas elecciones prometen no ser fáciles. De hecho, hace pocos días eligieron autoridades de la Juventud Radical, y todo terminó con empujones y golpes. Y con el sector de Yacobitti desconociendo a la nueva presidenta de la Juventud, Valeria Pavón, que responde al gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés.

Si esto pasó en las elecciones de la Juventud Radical, no es dificil imaginar qué puede pasar en las que eligen al presidente del partido.

Quitarle al sector de Yacobitti la presidencia de la Juventud Radical que detentó por años su espacio probablemente no sea la última de las represalias por romper el bloque. Ahora la discusión se traslada a quién ocupará la vicepresidencia del Senado, lugar en el que está actualmente Lousteau.

Algunos sectores ya dan por cierto que Lousteau será desplazado para darle ese puesto a Carolina Losada, quien viene de hacer una buena elección en Santa Fe, en la que destronó a la lista de Lousteau, pero también a las de Horacio Rodríguez Larreta, Mauricio Macri y Patricia Bullrich. Desde el espacio de Lousteau, no confirmaron si dejará ese puesto y se limitaron a recordar que "según el reglamento, la elección de autoridades es el 24 de febrero". Es decir, hay tiempo para que las cosas cambien varias veces.