La ministra de Salud, Carla Vizzotti, oficializó la incorporación de la segunda dosis de la vacuna contra la varicela en el Calendario Nacional de Vacunación (CNV) para los niños y niñas de 5 años  a partir de enero de 2022. 

Hasta el momento, en la Argentina se aplica una única dosis a los 15 meses de vida y se estima que existen entre 350 y 400 mil casos de varicela por año, de los cuales solo entre 150 y 180 mil son notificados en en el Sistema Nacional de Vigilancia en Salud (SNVS).

Según señala en sus considerandos la Resolución 3613/2021 del Ministerio de Salud, publicada esta tarde en un suplemento del Boletín Oficial, "la varicela es una de las enfermedades infecto-contagiosas más frecuentes durante la infancia, afectando especialmente a niños y niñas en edad preescolar y escolar, y continúa siendo una de las principales enfermedades exantemáticas de la infancia en nuestro país".

De acuerdo con las cifras del Ministerio de Salud, la tasa de hospitalización por varicela es de 1 ó 2 casos cada 1000 enfermos en niños y de 14 a 18 casos por cada 1000 enfermos en adultos. Mientras que la letalidad es de 0,6-1 cada 100.000 enfermos y se registraban entre 15 y 25 muertes al año por esta misma causa.

Su alta contagiosidad requiere aislamiento del paciente entre 7 y 14 días, "impactando significativamente en el ausentismo escolar y pérdida de productividad laboral de las personas encargadas de su cuidado", resalta la resolución firmada por Vizzotti en la que se define incorporar la segunda dosis de refuerzo a los 5 años. 

Tal como ocurre con los demás inmunizantes del Calendario Nacional, la vacuna es gratuita y no será necesaria la presentación de una orden médica para acceder a su aplicación. La primera dosis, que se aplica a los 15 meses, fue introducida al CNV en  2015.

¿Qué síntomas tiene la varicela?

La enfermedad se manifiesta con fiebre moderada y, hacia los 7 a 14 días, un brote de lesiones en la piel que evolucionan a pequeñas ampollas que se convierten, luego, en costras. Estas lesiones se presentan por todo el cuerpo y se caracterizan por generar una gran picazón que, de rascarse, las lesiones pueden llevar a una sobreinfección.

Es recomendable que la persona enferma permanezca en su casa hasta que las ampollas hayan evolucionado a costras en su totalidad. 

Según información de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el objetivo de reducir significativamente la carga de enfermedad, con especial impacto en la morbimortalidad de los grupos más vulnerables, depende de alcanzar coberturas de vacunación elevadas y sostenidas en el tiempo.

Al respecto, en la Argentina, desde la implementación de las coberturas nacionales de vacunación contra la varicela, el resultado superó "el valor mínimo deseado de 80% únicamente en el año 2018", se precisó en la resolución publicada esta tarde.

Si bien suele ser considerada una enfermedad benigna de la infancia, su evolución en niñas y niños no se encuentra exenta de posibles complicaciones y puede tener una evolución complicada o grave al afectar a otras poblaciones susceptibles de alto riesgo como adultos, embarazadas, personas inmunosuprimidas o con ciertas enfermedades subyacentes.

"Hace tiempo que los pediatras queríamos tener la segunda dosis"

"La mayoría de los países que incorporaron la vacuna arrancaron con dos dosis para disminuir la transmisión de la enfermedad", contextualizó Ricardo Ruttimann, infectólogo pediatra, miembro de la Comisión de Vacunas de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI) y de la Fundación Centro de Estudios Infectológicos. 

Además, Ruttimann recordó que en "la edad de ingreso escolar hemos tenido siempre coberturas muy altas", pero se vieron afectafas por la pandemia de coronavirus.

Consultado, por la agencia estatal Télam, sobre cómo revertir la caída en la aplicación de vacunas del CNV, Ruttiman explicó: "Hay que anunciar la incorporación de vacunas que son seguras y efectivas. Eso atrae a la población y el hecho de tener esta segunda dosis es de interés de la gente, que se acerca al vacunatorio para recibir las otras vacunas que corresponden para la edad e sus hijos.

Por último, Ruttiman recordó que la Comisión Nacional de Inmunizaciones recomendó que puede coadministrarse, por ejemplo, con la vacuna contra el coronavirus, en el caso de los chicos, o con la antigripal, en los adultos.

Por su parte, Ana Ceballos, pediatra y secretaria del Comité de Infectología de Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) de Córdoba, dijo que lo considera "importantísimo. Hace tiempo que los pediatras queríamos tener la segunda dosis". "Es una muy buena noticia porque hay que recuperar el esquema y completar que los chicos estén bien vacunados", completó.