Córdoba es el epicentro de la nueva ola de contagios por Covid-19, ahora con la variante Ómicron como protagonista. Los centros de testeos provinciales están desbordados desde el fin de semana, con hasta 4 horas de espera e insumos insuficientes. 

Los medios locales se hicieron eco de las recomendaciones del Conicet y difundieron los tips para evitar los contagios:  reducir la cantidad de personas en reuniones familiares, volver a cerrar los eventos masivos, recuperar el teletrabajo, otorgamiento de licencias a personas de riesgo y maximizar las medidas de cuidado. 

El bioquímico, investigador del Conicet y docente de la Universidad Nacional de Córdoba, Rodrigo Quiroga, publicó un largo hilo de tuits en el que advierte que la provincia mediterránea pasó de 75 casos a 2875 en 14 días, que hay casos positivos y contagiados en reuniones sociales de 6 a 10 personas al aire libre, y hasta 50 contagios en fiestas. 

Desde el fin de semana pasado, hay extensas colas en los centros de testeo, con hasta 4 horas de espera, en algunos casos infructuosas por falta de insumos. 

El Ministerio de Salud provincial decidió ampliar los horarios de atención de los Centros de Participación Comunal (CPC) hasta las 20. 

¿A quién testear?

Ante este panorama, el dilema del gobierno provincial y de los especialistas es quiénes deben ser testeados ante una ola que parece seguirá creciendo por las reuniones de fin de año. 

Mientras Córdoba testea solo a las personas sospechosas con síntomas y a los contactos estrechos de un positivo con o sin síntomas, los expertos del Conicet sugieren que esos grupos no sean testeados sino que sean considerados positivos, tanto los convivientes como los contactos estrechos, ya que en muchos casos esperan hasta tener los resultados del hisopado para aislarse.  

El objetivo es ahorrar las pruebas de hisopado para los casos asintomáticos y aquellas personas que quieran testearse, por ejemplo, luego de asistir a un evento masivo para reducir los riesgos de circulación. 

La circulación entre los jóvenes y una vuelta al teletrabajo y las licencias

En su hilo de Twitter, Quiroga indicó que, en este momento, los contagios se concentran en la franja de 15 a 30 años y que parecería haber menos casos asintomáticos, ya que casi todos mostraron síntomas 2 o 3 días después de contagiarse. 

"La mayor parte de los contagios se observan en personas jóvenes, pero las fiestas reúnen a diferentes generaciones y pueden tener un enorme impacto", advirtió Sol Minoldo, socióloga del Conicet y la Universidad Nacional de Córdoba, en diálogo con el diario La Voz. 

Minoldo reconoció que la situación social hace difícil regresar a una cuarentena, pero sostiene que tomar algunas medidas es necesario para "lograr un modesto impacto para reducir contagios puede hacer la diferencia entre colapsar o no el sistema sanitario". 

Entre las eventuales medidas inmediatas se sugiere retomar el teletrabajo y la telemedicina en los casos en que sea posible, y dar licencia a las personas de riesgo, aunque estén vacunados.

Además, los investigadores consideraron imperioso volver a tomar las medidas de prevención para reducir los riesgos de contagios en los diversos ámbitos, tales como priorizar los encuentros al aire libre , mantener el distanciamiento físico, ventilar los lugares cerrados y volver a usar barbijos de buena calidad.