John Bell, inmunólogo y profesor de medicina en la Universidad de Oxford, aseguró que lo peor de la pandemia de coronavirus ya quedó atrás y que la nueva variante Ómicron “parece ser menos grave” que las anteriores.

Según Bell, las campañas de vacunación cambiaron drásticamente el curso de la pandemia, ya que aunque las hospitalizaciones aumentaron a medida que la variante Ómicron se propagaba por la población, la enfermedad “parece ser menos grave y muchas personas pasan un tiempo relativamente corto en el hospital".

El docente de la Universidad de Oxford dijo a la BBC que los pacientes necesitaban menos oxígeno y que la duración promedio de la estadía se redujo a tres días.

"Las horribles escenas que vimos hace un año con muchas personas que murieron prematuramente ahora son historia desde mi punto de vista y creo que deberíamos estar seguros de que es probable que continúe", afirmó.

Sin nuevas restricciones

Asimismo, Bell apoyó la decisión del Gobierno británico de no imponer nuevas restricciones hasta Año Nuevo, aunque otros científicos han criticado “la indecisión” ante esta nueva ola de casos.

El primer ministro Boris Johnson anunció que todo aquel que pueda trabajar desde su casa debe hacerlo, extendió la obligatoriedad de las mascarillas a la mayoría de lugares públicos cerrados desde el viernes e impuso la presentación de un pasaporte de vacunación para acceder a clubes nocturnos o espectáculos masivos, entre otras medidas de prevención.

Sin embargo, a medida que aumentan los contagios en el Reino Unido comienza a notarse la falta de personal sanitario: se estima que solo en Londres podría haber hasta un 40 por ciento menos de personal de la salud en hospitales públicos.

Mientras tanto, el ministro de Salud británico, Sajid Javid, descartó el lunes que se vayan a producir más cambios en la configuración de las actuales restricciones, ya que el Gobierno espera más pruebas sobre el impacto de la nueva variante en los servicios sanitarios.

Escocia, Gales e Irlanda del Norte, por su parte, introdujeron nuevas reglas de distanciamiento social, cerraron clubes nocturnos y limitaron el número de personas en las reuniones.

El Reino Unido registró otros 321.036 casos de coronavirus durante el período navideño, según muestran las últimas estadísticas oficiales.

Los datos del NHS (el sistema público de salud británico) publicados el lunes mostraron que hubo 113.628 casos adicionales en el Reino Unido el día de Navidad, otros 108.893 el domingo 26 y 98.515 en las últimas 24 horas.