“No es normal que hayan pasado 15 años sin desfiles militares. No los hubo por revanchismo y persecución del gobierno anterior. Las fuerzas armadas actuales necesitan el respeto de la sociedad”, dijo el ministro de Defensa, Julio Martínez, en referencia al desfile militar que tuvo lugar por segundo año consecutivo en conmemoración a la Revolución de Mayo y que ocupó ayer unas veinte cuadras a lo largo de la Avenida Del Libertador.

Este tipo de eventos, dio a entender el ministro en diálogo con el programa “Toma y Daca” por Radio Con Vos (FM 89.9), ha llegado para quedarse. Martínez comentó también el papelón de un cartel ubicado en el palco oficial en el que se señalaban los años “1816-2017”, cuadno la celebración era por el 25 de mayo de 1810. “Fue un error histórico grave. Alguno de los organizadores metió la pata.  Lo corrigieron, le pusieron un cero arriba, pero en el final del acto el parche se despegó…”.

También aclaró sobre la figura del ex carapintada Aldo Rico, quien el año pasado desfiló honrado como excombatiente. Explicó que si bien es una presencia “no grata”, no hubo nada que se pudiera hacer para que no asista. Lo mismo pareció sugerir sobre Cecilia Pando -quien estuvo en primer fila pidiendo por la libertad de los genocidas- de quién Martínez se desligó diciendo: “Nos tiene sin cuidado lo que haga esa señora. Cecilia Pando estaba como público, no la invitamos ni tenía nada que ver”.

El ministro además se refirió a las denuncias por una potencial compra de armamento a Estados Unidos por parte del Gobierno por 2 mil millones de dólares, como parecían sugerirlo las conversaciones entre el ex embajador Martín Lousteau y funcionarios de ese país. Dijo que sólo se trató de un intercambio de información entre ambos y que “si bien lo de la compra son mentiras, eso no quita que no se necesiten". "Las Fuerzas Armadas están en mal estado en sus capacidades y salarialmente”, sostuvo y justificó que por eso se inició "un proceso de recomposición del salario de las fuerzas”.

Martínez también se pronunció brevemente sobre la crisis en Brasil y las manifestaciones populares contra el presidente Michel Temer: “la situación de Brasil nos preocupa y nos afecta”. Consultado sobre la decisión del mandatario de ese país de enviar a militares a reprimir las protestas expresó: “Sacar el ejército a la calle es algo que nosotros no podemos hacer porque está prohibido por ley. Si ellos lo hicieron, es porque deben tener esa posibilidad”.