El oficialismo no pudo completar la embestida en el Consejo de la Magistratura para suspender, iniciarle un juicio político y desplazar al camarista federal Eduardo Freiler. La comisión de Disciplina y Acusación del Consejo que preside el diputado macrista Pablo Tonelli logró aprobar un dictamen de acusación contra Freiler pero no consiguió los nueve votos necesarios (dos tercios de la comisión) para iniciar el jury contra al camarista. La mayoría de los consejeros, alineados con el Gobierno nacional, no logró torcer la voluntad ni obtener el voto decisivo del catedrático Juan Candis, quien sostuvo que la acusación contra Freiler “es apresurada”, “poco seria” y “tiene intencionalidad política”. El camarista ya había rechazado las acusaciones en su contra sobre “mal desempeño” y “enriquecimiento ilícito” y se las atribuyó a la Casa Rosada como una forma de disciplinamiento al Poder Judicial.

Aunque el tratamiento de la acusación contra Freiler está previsto en la próxima reunión del Consejo de la Magistratura, el oficialismo tendrá que esperar mejores tiempos y aplazaría sin fecha el intento por enjuiciar a Freiler. La correlación de fuerzas no le alcanzó ayer para aconsejar al plenario la apertura del procedimiento de remoción y suspensión de Freiler, a pesar de las presiones que llovieron sobre Candis para sumar su voto. “Los cargos que se le imputan están relacionados con omisiones a sus obligaciones fiscales, falseamiento de datos en sus declaraciones juradas de bienes, justificación de incremento patrimonial y el nivel de gastos, entre otros”, dice la página web del Consejo.

El oficialismo igual logró imponer el dictamen de acusación al camarista federal, que apoyaron –además de Tonelli– los consejeros Juan Bautista Mahiques (representante del Poder Ejecutivo); Miguel Piedecasas (abogado del interior), Luis María Cabral (juez), Angel Rozas (senador UCR), Leónidas Moldes (juez) y Gustavo Valdés (diputado UCR). Pero los votos en contra de Ruperto Godoy(senador FpV-PJ) y fundamentalmente de Candis (académico), le impidieron avanzar con el jury.

Durante el debate, Tonelli insistió en las acusaciones contra Freiler: “en las más de 200 páginas del dictamen, está claramente demostrado que el magistrado no puede justificar el nivel de gastos realizados”, dijo el diputado macrista que encabezó la instrucción. Los dos jueces que integran la Comisión de Disciplina, Luis María Cabral y Leónidas Moldes, votaron a favor del inicio de un proceso de remoción contra su colega y lo fundamentaron en la “falta de decoro” que ser “propio de los jueces” al haber realizado gastos que “no guardan relación con sus ingresos”.

“En este caso, no están dadas las condiciones para tomar la decisión de un juicio político, dijo Candis al fundamentar su voto negativo y marcar las diferencias que en los casos de Norberto Oyarbide y Carlos Rozanski en los que votó alineado con la postura del oficialismo.

“Se ha hablado mucho de que si cambié, si no cambié, pero lo cierto es que el 4 de marzo yo planteé que notaba un apresuramiento en la decisión de imputar a Freiler”, dijo el académico, abogado y juez. Luego recordó que al dictamen inicial elaborado por Tonelli se le quitaron algunos capítulos que tenían que ver con licencias y viajes realizados por el camarista, ante observaciones realizadas en el seno de la Comisión por no considerarlas significativas, y que el propio Freiler había rebatido en su descargo.

También remarcó el “uso abusivo de las presunciones” para estimar valores de bienes inmuebles e inmuebles del juez acusado. 

Candis consideró como un “hecho llamativo” la autorización concedida en 2007 al camarista para que realizara “actividades comerciales” paralelas a su desempeño como magistrado. “Si bien es cierto que puede haber un desfasaje económico entre los ingresos y los egresos, también hay una actividad comercial que le autorizó el Consejo de la Magistratura, y eso es muy grave. El desfasaje puede surgir a partir de esa actividad comercial. Él no presentó nada, pero tampoco se lo pidieron”, consignó Candis, que llamó la atención al resto de los consejeros sobre por qué motivos no se pidió esa prueba en particular, y si un cúmulo de otras.

“A un juez no se lo lleva a un juicio político por presunciones”, sostuvo el académico y agregó que por tener identidad peronista coincidió “en muchas cosas con el kirchnerismo” aunque no estuvo de acuerdo con otras. Luego dejó en claro que su designación en el Consejo de la Magistratura fue  “por unanimidad, tanto radicales como peronistas”.

Para Godoy, “el resultado indica claramente que no tienen el noveno voto, así que sabiendo eso advierto que no lo van a poder llevar al plenario”. Para el senador sanjuanino (FpV-PJ), el plenario “claramente ha sido una derrota política” para los consejeros alineados con el Gobierno y aseguró que el resultado “se les notaba en la cara”.