Todos los años el Oscar tiene varias ternas que parecen definidas mucho antes de que arranque la ceremonia. En la edición 2022, como parte de ese grupo están las dos categorías interpretativas masculinas. Las principales paradas de la temporada de premios han estado monopolizadas por los triunfos de Will Smith por su rol estelar en Rey Richard: una familia ganadora, mientras que en Reparto asoma como amplio favorito Troy Kotsur por su labor en CODA: Señales del corazón. Pero, ojo, porque nunca puede descartarse una sorpresa, como demuestra lo ocurrido hace doce meses, cuando se daba por descantado el triunfo de Chadwick Boseman como Actor Protagónico por La madre del blues y finalmente se impuso ese veterano de mil galas que es Anthony Hopkins gracias a El padre. ¿Habrá batacazo este año? ¿Podrá uno de los secundarios más requeridos de los últimos tiempos, Jesse Plemons, irse con una estatuilla en su primera vez en el Dolby Theatre? ¿Y Benedith Cumberbarch, cuyas acciones y sentimientos contradictorios son el epicentro dramático de El poder del perro, arrebatarle el premio a Smith?

Actor Protagónico

Benedith Cumberbarch en El poder del perro,

Hacia un buen tiempo que este quinteto no tenía figuras del peso de las este año. De hecho, es la primera vez en 40 años que ninguno de los cinco actores caminará por primera vez la alfombra roja. Por el contrario, entre ellos está Denzel Washington gracias a la adaptación de La tragedia de Macbeth a cargo del director Joel Coen, que con ésta sumó su novena nominación y se puso a la par de Spencer Tracy, Al Pacino y Paul Newman. Lo particular es que solo una de esas nueve fue por una película nominada en la categoría principal (Fences en 2017), lo que habla de la alta estima que le tienen en la industria.

Pero está difícil para el ganador en Reparto en 1989 por Días de Gloria y como protagonista en 2001 gracias a Día de entrenamiento. Tan difícil como para Andrew Garfield por Tick, tick... Boom! (segunda visita al Dolby después de debutar en 2017 por Hasta el último hombre), el británico Benedict Cumberbatch por El poder del perro (también en su segunda excursión al Dolby luego de la de 2015 por El código Enigma) y el español Javier Bardem, presente por cuarta vez gracias a Being The Ricardos y otro que, como Washington, sabe qué es ganar, ya que lo hizo en 2007 como Actor de Reparto por Sin lugar para los débiles (también estuvo nominado en 2000 por Antes que anochezca y en 2011 por Biutiful).

¿Por qué tan difícil? Porque, más allá de Cumberbatch haya ganado más premios en estos meses, ni siquiera pudo imponerse de local en los Bafta, algo que sí había hecho Hopkins el año pasado. Allí cayó, como en todas las galas más importantes, ante Will Smith, para quien parece que la tercera será la vencida luego de haberse ido con las manos vacías en 2001 y 2006 por sus papeles en Ali y En busca de la felicidad, respectivamente. Se diría incluso que su Richard Williams, el abnegado padre de las hermanas Venus y Serena Williams en la biopic Rey Richard, le significó la llave para la abrir la puerta de una temporada de ensueño, agenciándose, además del galardón de la Academia británica, el devaluado Globo de Oro, el SAG del Sindicato de Actores y el Critics’ Choice.

Actor de Reparto

Troy Kotsur en CODA

Aquí la cosa es muy distinta a Actor Protagónico. No por la ausencia de un claro favorito, sino porque solo uno de los cinco nominados tiene experiencia en materia de Oscar. Se trata de J.K. Simmons, que se llevó la estatuilla de este rubro en su primera visita al Dolby gracias al duro profesor de batería que atormentaba al joven músico con aspiraciones de grandeza que protagonizaba Whiplash (2014). El pelado volverá a la gala más importante del show business por su trabajo en Being The Ricardos, y se las verá cara a cara con debutantes Ciarán Hinds (Belfast), Troy Kotsur (CODA), Jesse Plemons y Kodi Smit-McPhee (ambos por El poder del perro).

Al igual que con Cumberbatch, un análisis numérico inclinaría la balanza para Smit-McPhee, notable como el hijo de Kirsten Dunst en la adaptación a cargo de Jane Campion de la novela homónima de 1967 escrita por Thomas Savage. Pero en la temporada de premios no siempre dos más dos es igual a cuatro. En este caso, porque Troy Kotsur se ha quedado con casi las estatuillas más relevantes. Salvo en los Globos de Oro, donde se impuso Smit-McPhee, quien interpreta al padre de la adolescente que quiere dejar el emprendimiento de pesca familiar para perseguir su sueño de ser cantante metió un sprint final arrollador y se quedó con el Bafta, el SAG y el Critics’ Choice. Si cumple la lógica, Kotsur será el primer sordomudo en ganar un Oscar. El primer hombre, porque ya hubo una mujer que lo consiguió: Marlee Matlin en 1987 por Te amaré en silencio. Por esas vueltas de la vida, la actriz interpreta a la esposa de Kotsur en CODA