Dos paracaidistas brasileños saltaron ayer desde la terraza del famoso Edificio Italia, de cuarenta pisos de altura, en pleno centro de San Pablo, la capital económica de Brasil. Arthur Zanella y Thiago Negao lograron burlar la seguridad del edificio yendo a cenar al lujoso restaurante del último piso. En un momento dado, tomaron sus mochilas, fueron al baño, se pusieron sus miniparacaídas y se escaparon a la terraza, de donde saltaron.
El Italia es un edificio célebre en San Pablo y ya fue blanco del “hombre araña francés”, Alain Robert, que fue detenido por la seguridad cuando trepaba por la fachada de 165 metros de altura. Zanella y Negao practican “base jump”, un deporte extremo que consiste en saltar de puntos fijos como acantilados, torres o antenas. Zanella es conocido en Brasil porque saltó desde un morro carioca y aterrizó en pleno sambódromo como parte del desfile inaugural de Portela.
Esta vez, los dos socios hicieron una reserva en el restaurante, comieron, tomaron una botella de vino y pagaron la cuenta. Pasadas las diez de la noche, tomaron sus mochilas y fueron al baño, donde sacaron y se pusieron los pequeños paracaídas dirigibles que se usan en este tipo de salto. Inmediatamente salieron por una puerta de emergencia a la terraza y se pararon en la cornisa. Sólo los vio una empleada de limpieza, que empezó a gritar que alguien se iba a caer.
El salto fue perfecto y duró trece segundos hasta el aterrizaje en una avenida que, a esa hora, tenía poco tránsito. El vuelo fue filmado y subido a internet. Zanella y Negao guardaron sus cosas en el auto de un amigo que los esperaba y luego, en grupo, fueron a festejar su hazaña en un barcito cercano.
Un caso de base jump en San Pablo
Paracaidistas urbanos
Este artículo fue publicado originalmente el día 20 de noviembre de 2016

