"La inflación se ataca con política macroeconómica y que para que esa lucha sea efectiva hace falta un apoyo político claro en lugar de llevar acciones que generan incertidumbre". Con esa frase, Martín Guzmán anunció el plan del Gobierno para apaciguar al constante suba de precios que para marzo, según anticipó el propio ministro de Economía, será mayor al 6 por ciento mensual. "Efectivamente, la inflación del mes de marzo va a ser la más alta del año", dijo, pocas horas antes que el INDEC publique los resultados del Índice de Precios al Consumidor.

La palabra de Guzmán se conoce pocas horas después de su regreso al país, tras una gira por Brasil junto al embajador Daniel Scioli para garantizar el suministro de gas en el invierno argentino. En una entrevista con C5N, el titular del Palacio de Hacienda aseguró que "la economía funciona en un contexto de relaciones de poder", por lo que para atacar la inflación "necesitamos construir credibilidad en un programa sólido y consistente que hemos diseñado" y que, sin negar las tensiones al interior del frente de Todos, "el Presidente (Alberto Fernández) ha marcado que gestionaremos con gente que esté alineada con el programa económico que se ha definido", completó.

Por su parte también añadió que se ejecutará la política fiscal trazada con el Fondo Monetario Internacional que implica reducir el déficit fiscal al 2,5 por ciento para este año. "Estamos llevando adelante políticas para garantizar que el poder adquisitivo crezca, lo cual es fundamental para que la economía continúe su recuperación", comentó.

Retenciones

Al ser consultado sobre una posible suba de las retenciones a las exportaciones de granos, el ministro dijo que "hay una definición política tomada de no aumentar los derechos de exportación”. "Es importante que los funcionarios que trabajan estén alineados con lo que se define políticamente y que no digan cosas que puede generar incertidumbre sobre las decisiones que se han tomado", agregó Guzmán, en lo que buscó ser un tiro por elevación a otros funcionarios del Gobierno nacional, aunque sin precisar en nombres.

"Si a pesar de ya haber tomado una decisión decimos que puede que se suban (las retenciones) no tenemos, por un lado, el efecto de poder diferenciar el precio internacional del precio doméstico, pero tampoco el efecto de la certidumbre asociada a una decisión", concluyó el ministro.