Podría haber sido un desastre para Alpine. En la vuelta 9, Pierre Gasly, perdió el control de su auto y tras chocar a Yuki Tsunoda casi embiste a su compañero de equipo, Franco Colapinto. La fortuna, pero sobre todo los reflejos del argentino, evitaron la catástrofe para el equipo francés.
Gasly iba detrás de Tsunoda y lo embistió antes del ingreso a la chicana posterior al túnel. “Me quedé sin frenos”, alegó después el francés para explicar la razón por la cual su Alpine fue directamente contra el Red Bull del japonés.
Tras el impacto, el auto de Gasly cruzó la chicana con rumbo directo al Alpine de Colapinto. Los autos estuvieron cerca de impactar. Eso no ocurrió porque el argentino evidentemente advirtió en sus espejos que atrás suyo algo pasaba y se abrió ligeramente a la izquierda.
Tras el choque, Gasly se retiró de la carrera. De no ser por sus reflejos, Colapinto probablemente hubiera corrido la misma suerte.