La Sala VI del Tribunal de Juicio absolvió ayer por el beneficio de la duda a un empresario agrícola de Las Lajitas, que estaba acusado de abuso sexual en perjuicio de su hija cuando ella tenía entre 2 y 3 años. 

La directora del Observatorio de Violencia Contra las Mujeres, Ana Pérez Declercq, que se presentó en el proceso como amicus curiae, señaló que el fallo adolece de perspectiva de género, sostuvo que a les niñes se debe creerles cuando manifiestan haber sido abusades. Además señaló que en este juicio "no se pudo demostrar el hecho" pero eso "no quiere decir que no haya pasado", por lo que consideró que los organismos del área de niñez e infancia de la provincia deben dar protección a la niña.

La absolución por la duda se dio por el voto mayoritario del juez José Luis Riera, que presidió el tribunal, y por la jueza Mónica Mukdsi. En cambio, el juez Guillermo Pereyra votó la absolución lisa y llana. 

El empresario usó su derecho a hablar antes del veredicto. Sostuvo que se dijeron "barbaridades" durante las audiencias. "Nunca abusé de mi hija", afirmó. Dijo que los 3 años que convivió con la nena fueron "lo mejor" y aseguró que la denuncia contiene "un montón de mentiras." "Se me revuelven las tripas de solo ponerme a pensar", manifestó respecto al delito por el cual se lo acusó. "Jamás haría algo contra mi hija ni contra nadie", insistió.

La aplicación del principio de la duda que benefició al empresario no implica que el hecho no haya ocurrido, sino que el tribunal no pudo llegar a la certeza sobre la responsabilidad del acusado. 

Por otro lado, a pesar de esa duda, el tribunal ordenó dejar sin efecto una medida dictada en primera instancia y dispuso que el padre sea revinculado con la niña. Dicho trámite se hará en el Juzgado de Personas y Familia competente. En el mismo tono, el tribunal rechazó la demanda civil por daños y perjuicios que había interpuesto la querella. 

Tras el fallo, la madre de la niña resaltó que mientras se esperaba la sentencia “el imputado tenía una actitud relajada", que tanto él como sus allegados se mostraban en "un clima distendido, que no se entendía, sabiendo que iban a dictar una sentencia por algo tan grave”. 

El abogado querellante Juan Casabella Dávalos, quien había pedido 7 años de prisión efectiva para el acusado y la reparación económica para la víctima de este proceso, dijo a Salta/12 que esperará la lectura de los fundamentos para apelar la sentencia. 

"La absolución es por el beneficio de la duda, que es una de las posibilidades que planteaba la defensa, con un voto en disidencia de Pereyra", recordó el abogado. Añadió que esa duda "lógicamente va a generar que recurramos el fallo, tenemos que esperar los fundamentos y luego definiremos los agravios que plantearemos en el recurso", comentó. 

El fiscal Federico Obeid había solicitado 4 años de prisión efectiva. La asesora de incapaces 3, Gabriela Cardón, había adherido a ese pedido y también al reclamo civil de la querella.

"Hay que creer en les niñes"

"Les niñes tienen voz y cuando dicen algo están diciendo la verdad, y a esto lo dice la jurisprudencia y hay que creer en esos niñes que manifiestan cuando han sido abusados o abusadas", dijo a Salta/12 la directora del OVCM, Ana Pérez Declercq, luego de conocerse la sentencia. 

"Pienso también que en la sentencia se ha ordenado la revinculación y si se lo absolvió por el beneficio de la duda es que no se pudo demostrar el hecho", advirtió. Recordó que esto "no quiere decir que no haya pasado". "Creo que están los organismos en la provincia como para proteger a esa niña y hay que buscar esa protección", manifestó la funcionaria.

Respecto al desarrollo del juicio, "en líneas generales" Pérez Declercq reflexionó: "Somos sociedad a la que aún le falta perspectiva de género, por algo está la Ley Micaela. (Aunque) las capacitaciones (que prevé esa legislación) no van a cambiar cabalmente de la noche a la mañana la falta de perspectiva de género, creo que eso también influye en las decisiones de los tribunales".

El Observatorio de Violencia Contra las Mujeres se presentó como amicus curiae en el juicio. Antes de su sentencia el tribunal concedió la palabra a Pérez Declercq. La funcionaria se refirió a las expresiones que tuvo la defensa ejercida por el abogado Matías Adet durante los alegatos, cuestionando al organismo, "se nos denostó como amicus lejanos y otros agravios", sostuvo y recalcó que esas expresiones dan cuenta de la falta de perspectiva de género.

La directora señaló la doble vulnerabilidad de la víctima en este proceso, por la edad y por el género al tratarse de una niña. Sostuvo que era necesario que "la investigación y el juzgamiento sean con perspectiva de género" y que "sancionando estos hechos se repare a la víctima y se erradiquen estos delitos ya que al actuar de otro modo importa el incumplimiento del deber de diligencia estatal y tolerancia ante estos hechos de violencia de género". E insistió en el deber de "debida diligencia reforzada estatal ante la violación de derechos de las niñas".

Asimismo, Pérez Declercq indicó que deben evitarse las manifestaciones de "prejuicios" durante el proceso penal, entre éstos "el mito de que cuando un progenitor denuncia al coprogenitor por el delito de abuso sexual contra el hijo o hija, se choca con el prejuicio de falsa denuncia o la teoría del complot". Añadió que denunciar ante la sospecha de estos hechos tiene que ver con el ejercicio de la "responsabilidad parental".

La funcionaria citó jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de Buenos Aires, que en la anulación de una sentencia absolutoria a un padre que había sido acusado por abuso sexual en perjuicio de sus dos hijos cuando eran menores de edad, destacó que durante el proceso hubo una mirada discriminatoria sobre la madre de las víctimas, que impulsó el proceso. "La madre de los niños aparece en el fallo como una mujer que no se adecúa a las expectativas que los denunciados suponen que debería cumplir como una buena madre quien aparece como sospechosa al punto de inventar un abuso sucedido a sus hijos que se expresarían bajo su completa influencia", manifestó. Esto coincide con el tratamiento que en este caso se le dio a la denunciante durante el juicio de la Sala VI.

Por último, Pérez Declercq dijo que "la ausencia de investigación, sanción y reparación a la víctima constituye un mensaje para toda la sociedad que claramente expresa que esta forma de violencia contra las mujeres es tolerada, promoviendo su impunidad y la inseguridad de las niñas y mujeres para el acceso a la justicia".

Salta/12 consultó a la familia y al abogado del absuelto respecto a la conformidad con la sentencia por la duda o apelarán, pero no se expresaron.