El partido gobernante de Japón y sus aliados obtuvieron en las elecciones de este domingo suficientes votos para formar una amplia mayoría en la Cámara Alta del Parlamento, dos días después de que el exprimer ministro Shinzo Abe fuera asesinado durante un acto de campaña.

La formación gobernante, el Partido Liberal Democrático (PLD), al que pertenecía Abe, y sus aliados del partido Komeito reforzaron su dominio con más de 75 de los 125 escaños de la Cámara Alta, según informaron medios nacionales.

Ambos partidos forman parte de lo que ahora es una supermayoría de dos tercios dispuesta a enmendar la Constitución pacifista del país y reforzar su papel militar a nivel mundial, un objetivo de Abe desde hace tiempo.

El asesinato del exdirigente, que fue baleado el viernes, empañó la votación, pero el primer ministro Fumio Kishida insistió en que la conmoción no iba a detener el proceso democrático.

"Creo que es importante que se hayan celebrado las elecciones de manera normal", comentó Kishida, quien remarcó que va a centrar su mandato en la lucha contra la covid, la guerra en Ucrania y la inflación.

El cuerpo de Abe llegó a Tokio el sábado. Su velorio y posterior funeral se celebrarán en el Templo Zojoji, ubicado en la capital.

El asesinato conmocionó al archipiélago y a la comunidad internacional, que envió una multitud de condolencias y condenas.

El hombre acusado de su asesinato, Tetsuya Yamagami, de 41 años, está detenido y declaró a los investigadores que atacó a Abe porque creía que el político estaba vinculado a una organización que no fue identificada.

La prensa local describió a esta entidad como una organización religiosa y dijo que la familia de Yamagami había sufrido problemas financieros como consecuencia de las donaciones de su madre al grupo.