Los partidos políticos de Sri Lanka acordaron este lunes designar a un nuevo presidente interino el próximo 20 de julio para poner fin al vacío de poder que dejará la renuncia del todavía presidente Gotabaya Rajapaksa, que se hará efectiva el próximo miércoles. El mandatario fue trasladado a una base aérea cerca del aeropuerto internacional de la capital, Colombo, anunciaron funcionarios, lo que alimenta la hipótesis de una huida al extranjero.

Rajapaksa anunció que abandonaría el cargo el sábado pasado, después de que miles de manifestantes asaltaran su residencia oficial en Colombo, que él ya había abandonado previamente junto a sus cuerpos de seguridad frente al aviso de nuevas protestas masivas. Su dimisión se sumó a la anunciada horas antes por el exprimer ministro, Ranil Wickremesinghe, pero que todavía no se ha formalizado, para dar paso a un gobierno de unidad nacional capaz de sortear la grave crisis económica que atraviesa la nación isleña. 

Buscando al sucesor de Rajapaksa

El Parlamento de Sri Lanka elegirá el próximo 20 de julio al nuevo presidente, que se encargará de dirigir de manera interina el país hasta la celebración de nuevas elecciones. Luego de una reunión de los partidos, una vez formalizada la renuncia de Rajapaksa, la Cámara recibirá las postulaciones el próximo 19 de julio, y "se realizará la elección el miércoles 20 para elegir a un nuevo presidente", informó en un comunicado el presidente del Parlamento, Mahinda Yapa Abeywardena.

Sumida en una de las peores crisis económicas desde su independencia en 1948, la designación de un nuevo presidente resulta fundamental para la formación de un nuevo gobierno que cierre las negociaciones con el FMI un programa de rescate que le permita restaurar la estabilidad fiscal.

Entre los posibles candidatos a la presidencia destaca el actual líder opositor Sajith Premadasa, quien le disputó a Rajapaksa las elecciones presidenciales de 2019, en las que fue derrotado al obtener el 42 por ciento de los votos, un diez por ciento menos que su rival principal. Sin embargo, los partidos de la oposición "no se pusieron de acuerdo sobre quién lideraría el gobierno de unidad, con dos nombres propuestos por el actual líder opositor Sajith Premadasa y otros del 'grupo independiente' de parlamentarios que se separaron del partido del presidente Rajapaksa", aseguró el asesor político Aruna Kulatunga.

Dudas en torno al futuro

Pese a la alegría que produjo entre los manifestantes el anuncio de dimisión de Rajapaksa, una noticia que venían exigiendo desde el inicio de las protestas a finales de marzo, las dudas todavía invaden a muchos de ellos. Es el caso de Abeysinghe, que un día más acudió al punto neurálgico de las protestas, en el parque Galle Force frente a la Secretaria Presidencial, y que relata que la renuncia de Rajapaksa no implica que se haya solucionado el costo elevado del combustible u otros bienes básicos.

"El único cambio que espero es que baje el costo de vida", dijo este hombre de 63 años, que no tiene claro el éxito que alcanzará la nueva alianza política promovida por la oposición. Sri Lanka atraviesa una grave crisis económica con escasez de medicamentos, alimentos y combustible, provocada en parte por el gran endeudamiento, erradas políticas gubernamentales, y el impacto de los atentados de Pascua y la pandemia en el turismo.

Una situación que inquieta a una gran parte de la población que hasta ahora nunca había temido por su condición económica. "Nunca nos preocupábamos por la comida. Ahora que somos viejos nuestros hijos nos dan dinero para comprar bienes. Pero ellos tampoco pueden gastar dinero. ¿Cómo podemos suponer una carga para ellos cuando también están sufriendo?", afirmó Kusuma Pathirana, camino a comprar un poco de pan para cenar.

Turismo en el palacio

Gotabaya Rajapaksa, que el sábado huyó del palacio presidencial sitiado por manifestantes, encontró primero refugio en instalaciones de la marina, antes de ser trasladado a la base aérea de Katunayake, que se encuentra ubicada en el mismo perímetro que el principal aeropuerto del país, Bandaranaike. La presidencia no comunicó el lunes sobre el paradero ni la situación del mandatario, pero varios medios locales afirman que tiene previsto irse a Dubai.

Sin nadie que ocupe hasta el 20 de julio su puesto, los ciudadanos de Colombo se entretienen en estos días acudiendo a la residencia oficial del presidente para bañarse en su piscina, ejercitarse en el gimnasio o simplemente dar un paseo. Así lo demuestran numerosos videos difundidos en redes sociales, donde este lunes se observaban grandes filas de gente a las afueras del palacio presidencial aguardando su turno para ingresar.

Una vez adentro las escenas son variopintas, con decenas de personas sentándose en el sillón del despacho de Rajapaksa para imitar burlonamente al mandatario, otros descansando en los dormitorios, e incluso un padre que aprovecha para impartir a su hijo un curso avanzado de piano, una vez descubierto un piano en la planta baja de la vivienda.

El presidente, de 73 años, logró escapar el sábado del palacio presidencial por una salida secundaria. Los manifestantes, que ocupan el edificio desde hace dos días, encontraron allí 17,85 millones de rupias (unos 50 mil dólares) y las entregaron a la policía. "La policía recibió el dinero en efectivo y lo entregará a la justicia", dijo un vocero de las fuerzas de seguridad. También se encontró en el palacio presidencial una valija llena de documentos, según fuentes oficiales.