El director del Banco Nación, Claudio Lozano, aseguró este lunes que “no está atornillado al cargo” y remarcó que su renuncia está a disposición del presidente Alberto Fernández. La afirmación llega luego de que trascendiera que la nueva titular del Banco Nación, Silvina Batakis, habría pedido la renuncia de todos los directores de la entidad.

Por AM750, Lozano aseguró que “fueron muy sorprendidos con la decisión de reemplazar al Presidente de la entidad Eduardo Hecker por Silvina Batakis”. Inmediatamente, aclaró: “A mí nunca nadie, jamás, me pidió que renuncie.

“Soy director del Banco Nación. También soy el presidente de Unidad Popular, una de las fuerzas que integran el Frente de Todos. Mi manifestación respecto al rumbo de gobierno tiene que ver con integrar esa coalición. Por lo tanto, entran dentro del juego democrático y una realidad objetiva, que es que no tenemos un espacio institucional donde podamos dar un debate como fuerza política”, añadió.

Y sentenció: “Yo no estoy atornillado al cargo ni nada que se le parezca. Si el Presidente considera que me tengo que ir, con que me lo pida, alcanza. Esto nunca ocurrió”.

Sobre su vínculo con Batakis, además, añadió: “No tengo ninguna relación previa con Batakis salvo habernos saludado en alguna reunión. No tengo ningún inconveniente con la nueva presidenta. Desde que llegó al banco aún no tomó contacto con una gran cantidad de los directores. Pero estamos a disposición de ella”.

“Batakis es una directora más, como todos nosotros, a la que el Presidente le encargó la tarea de dirigir el banco. Pero quien nos tiene que plantear esto (por el supuesto pedido de renuncia) es Alberto Fernández. No es lo que corresponde. Menos todavía cuando estamos hablando de un banco que, respecto a los que recibimos la institución a finales del 2019, lo dimos vuelta. Multiplicó por cuatro su patrimonio, conectó la brecha tecnológica”, agregó Lozano.

Massa y el “plan de ajuste”

Por otro lado, Lozano cuestionó con firmeza los primeros pasos de la gestión de Sergio Massa al frente del ministerio de Economía. “Vemos que luego de dos meses de presiones muy fuertes por parte de los actores principales del poder económico en Argentina, parte de la desestabilización política sobre el Gobierno, termina haciéndose cargo de la gestión aquel actor interno del Frente de Todos que tiene mejores vínculos con el poder económico local y los Estados Unidos”, comenzó.

“El resultado es un intento de plan de ajuste y estabilización que en la práctica es una gran paritaria con el sector empresarial más concentrado y los acreedores. Tiene como base el mantenimiento de las metas del acuerdo con el Fondo y una profundización del ajuste fiscal. El ajuste fiscal tiene las tarifas como tema clave”, añadió en tono crítico.

Para Lozano, “no hay medidas concretas, más allá del anuncio genérico de un bono para jubilados y algún tipo de refuerzo sobre los trabajadores del sector privado, respecto a lo que es más de la mitad de la población que involucra a la informalidad y el desempleo”.

“No hay nada respecto a los trabajadores del sector público. Para los 25 millones de argentinos que no llegan a fin de mes, para los 17 millones de pobres y los 4 millones de hambrientos, que son las últimas cifras que tenemos, la verdad es que no tenemos ninguna noticia positiva. Tampoco hay ninguna definición concreta de cómo se va a intervenir para resolver la inflación”, finalizó.