La Policía de Colombia identificó este viernes a un exoficial haitiano, Joseph Felix Badio, como responsable directo de ordenarle a dos mercenarios colombianos matar al presidente de Haití, Jovenel Moïse. El plan inicial era "detenerlo", pero luego vino la orden de asesinarlo, según informaron.

Badio es un "exfuncionario del Ministerio de Justicia" que también ha trabajado en la lucha contra la corrupción con el servicio de inteligencia de la isla, aseguró el general José Luis Vargas, jefe de la Policía de Colombia, en conferencia de prensa.

Al principio, habría dado la orden de "detener al presidente", para supuestamente entregarlo a la DEA, la agencia antidrogas de los Estados Unidos.

Tres días antes de ese presunto operativo, el mandato fue otro: "Lo que hay que hacer es asesinar al presidente de Haití", aseguró el general Vargas.

Según el jefe de la Policía, el sospechoso Badio instruyó a Duberney Capador y Germán Rivera -el primero asesinado y el segundo, arrestado- para matar al presidente Moïse, el 7 de julio durante el ataque a su residencia en Puerto Príncipe, la capital haitiana.

La investigación aún no determinó el móvil de este asesinato. Nada se dijo acerca de si Badio actuó bajo órdenes o las razones por las que él habría decidido matar al líder haitiano.

Unos 26 colombianos y dos estadounidenses de origen haitiano fueron señalados como los integrantes de ese grupo comando que atacó a la familia presidencial.

Cómo fue el asesinato

Según el general Vargas, las investigaciones sobre el asesinato del presidente Jovenel Moïse son realizadas por la Dirección Nacional de Inteligencia, la Policía e Interpol en Puerto Príncipe, la capital haitiana.

De ese "trabajo integrado", dijo Vargas, se llegó a los datos acerca de cómo fue planeado y realizado el homicidio del presidente.

"Las reuniones iniciales (entre los acusados) se hicieron en Miami, en la empresa Security Services", detalló Vargas, de las que participaron varios de los que están detenidos por el homicidio de Moïse.

Inicialmente, eran reuniones acerca de brindar servicios de seguridad en Haití. A través de la empresa World Wide Capital se compraron los pasajes de avión para ir desde Miami a Puerto Príncipe. Y, una vez allí, los cuatro involucrados se unirían a otro grupo que ya estaba en Haití desde mayo, dando esos servicios. Incluso, el jefe de Policía de Colombia, detalló que hubo giros de dinero para gastos y alimentos.

Entre fines de abril y principios de mayo, cuatro de los que fueron detenidos tras el asesinato, viajaron, supuestamente, para dar servicios de seguridad. Y un mes después, se contactaron con otras 20 personas, que finalmente conformarían el grupo que organizó y llevó adelante el asesinato del presidente.

"Todos se alojaron en el mismo hotel y dieron servicios de seguridad durante tres semanas en el país", dijo el general Vargas.

Más tarde, a través de Badio, el grupo fue informado de que "iban a arrestar al presidente" y se empezó a planear cómo hacerlo. "La empresa Security Services fue notificada", afirmó el jefe de Policía.

Para eso, se instalaron en una casa cercana a la residencial presidencial desde donde hicieron trabajo de inteligencia.

Hasta que llegó el momento en que un grupo comando entró a la residencia, por la noche, y acribilló al presidente de Haití, quien murió en el acto y su esposa, Martine, fue herida y llevada a Miami, donde fue hospitalizada.

El martes pasado, la policía haitiana emitió una orden de registro contra Badio por su presunta participación en el complot, calificándolo de "peligroso y armado", según un comunicado publicado en Twitter.