Erika Guevara Rosas, directora para las Américas de Amnistía Internacional, y Mariela Belski, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Argentina, mantuvieron una reunión con el canciller Jorge Faurie. Luego brindaron una conferencia de prensa en la que se expresaron contra la decisión del gobierno de limitar el derecho de los migrantes a través de un decreto de necesidad y urgencia. También cuestionaron la alta cifra de femicidios y definieron a Milagro Sala como víctima de la “criminalización de la disidencia”.

En el encuentro con Faurie, las dirigentes del organismo de derechos humanos hablaron sobre la situación en Venezuela y México, el G20 y las políticas para refugiados y migrantes. Sobre este último tema hicieron hincapié en la conferencia de prensa que dieron más tarde, en la que llamaron la atención sobre el DNU que modificó la ley de migraciones en la Argentina.

Argentina, en los últimos años ha demostrado una política de asilo amplia y una ley migratoria modelo. Sin embargo, en enero de este año se adopta un decreto de necesidad y urgencia que modifica la ley de migración a efectos de limitar los derechos humanos de las personas migrantes en el país, así como acelerar expulsiones que pueden vulnerar aún más los derechos”, manifestó Guevara Rosas.

También se refirió a la situación de los derechos de las mujeres y remarcó que Latinoamérica está ocupa los primeros lugares de índices de femicidios. Añadió que en la Argentina, como en otros países de la región, “si una mujer sufre una complicación obstétrica relacionada con un aborto, no sabe si será atendida en el hospital  o si será encarcelada”.

Por último, se refirieron a la situación de Milagro Sala. La directiva de Amnistía Internacional señaló “que la región atraviesa una situación en donde los sistemas de justicia son usados para la criminalización de la disidencia”. "El caso Sala nos llega dentro de un marco regional. Encontramos que esa detención era violatoria de los derechos al debido proceso y un juicio justo", sostuvo.