Con un llamado a la “unidad” de América Latina, comenzó este martes el séptimo encuentro del Grupo de Puebla denominado “¡Cambio ahora!”.

El Grupo de Puebla es un foro de debate de dirigentes de izquierda de América Latina fundado en 2019. El encuentro de este año, presencial, se realiza en México.

En la ceremonia de apertura, presidentes y expresidentes plantearon la necesidad de trabajar unidos para mejorar la situación de las personas y enfrentar la “desigualdad” que genera más pobreza.

“América Latina junta puede mucho”, expresó el expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva. El exmandatario dijo que se debe trabajar para “reconstruir la unidad de América Latina y el Caribe”.

“Juntos podemos negociar en pie de igualdad con China, con Estados Unidos y poder tener acuerdos más favorables con la Unión Europea”, afirmó.

El líder de la izquierda brasileña, señaló que si trabajan juntos, los países latinoamericanos pueden exportar productos con valor agregado y no solo materias primas.

Lula dijo que se necesita una “nueva gobernanza mundial” mejor a lo que hoy es la Organización de las Naciones Unidas.

Señaló que la pandemia empeoró la situación de las personas en América Latina, y hoy hay trabajadores que perdieron sus empleos, gente que emigra y personas con hambre. 

El presidente de Argentina, Alberto Fernández, dijo que se viven “tiempos difíciles” y señaló la “tragedia” que significó la llegada del covid-19. Al respecto cuestionó la forma en que se reparte las vacunas.

“Somos sobrevivientes, y como sobrevivientes tenemos el deber ético de aprender de tanto dolor, asumir las carencias y ver de qué manera ponemos en marcha un mundo diferente”, afirmó.

Fernández señaló que la pandemia mostró la “desigualdad” que hay en el continente. Dijo que hay una “desigualdad en la que unos pocos especulan y ganan mucho. Ante esa realidad hay un imperativo ético que nos obliga a modificarla”, afirmó.

“Trabajemos unidos para recuperar el desarrollo productivo para todo el continente”, agregó.

El canciller de México, Marcelo Ebrard, pidió no resignarse ante la desigualdad. Calificó el encuentro como "un laboratorio de la esperanza, propuestas para el futuro de América Latina y el Caribe pero también para otras regiones del mundo".

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Situación política

El mandatario de Bolivia, Luis Arce, se refirió en especial a la situación interna de su país. Dijo que hay “intereses de la derecha” para desestabilizar a su gobierno y volver a la situación de 2019 cuando se dio un golpe de Estado contra Evo Morales.

Arce y la expresidenta de Brasil, Dilma Rousseff, advirtieron también sobre la situación del presidente de Perú, Pedro Castillo, quien debe enfrentar un pedido de vacancia presentado por la oposición en el congreso.

En la actividad también hablo el expresidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero quien afirmó que “el problema de Latinoamérica no es el comunismo, es la pobreza y la desigualdad”.

También estuvieron presentes los expresidentes Fernando Lugo (Paraguay) y Rafael Correa (Ecuador).