La escalada de la violencia urbana y el crimen organizado se hizo tan grande en la agenda pública de Rosario que al gobernador Omar Perotti no le quedó más opción que asumir en público la gravedad que ha ganado el problema y referirlo en declaraciones públicas. Lo hizo al sumar su repudio a la amenaza escrita contra periodistas, que se conoció el martes a la mañana, por medio de un cartel de tela colgado en la reja perimetral de Telefé Rosario. Pero en el mismo acto ubicó como co responsables de esta crisis a la oposición que gobernó antes que él, y al Poder Judicial por interferir en el control de la población carcelaria, desde donde siguen partiendo órdenes delictivas que se ejecutan en la calle. 

El jefe de la Casa Gris tuvo que hacerle frente al asunto en rueda de prensa, aunque la convocatoria formal era el anuncio de un paquete de obras viales en rutas de la región, con una inversión de 40 mil millones de pesos. Entre ellas, la conversión de la ruta provincial n° 21 en autovía, entre Alvear y Fighiera.  

"Nuestro repudio a cualquier amenaza o intimidación que genere falta de libertad en cualquier periodista y medio de comunicación", expresó Perotti para acallar murmullos que señalaban su silencio en las primeras horas posteriores a la aparición del trapo amenazante en Canal 5.

La leyenda intimidante decía: "A todos los medios de Rosario, dejen de ensuciar y condenar a los pibes con la lengua x q vamos a matar periodistas. Con la mafia no se jode. Sino caravana con el Noba", concluía en alusión al cantante de trap que murió este año.

Silencio, precisamente, fue el sustantivo que Perotti conjuró: "El delito necesitaba silencio. En mi primera incursión para ser gobernador hablaba sobre lo que pasaba en Rosario y muchos me criticaron porque decían que traía temas que no existían, que no había que instalar esos temas en la prensa, que le hacía daño a la ciudad, a la región. Lo que hace daño es no hablar de estas cosas. Puede no gustarnos lo que ponemos sobre la mesa, pero es la realidad y si no se habla y se muestra, el que quiere que no se conozca ni se difunda lo que está pasando es el delito. El resto no tiene por qué molestarse ni enojarse aun cuando surjan críticas. Es la mejor forma de que haya control social", señaló el jefe de Gobierno.

Perotti reveló que en privado se reunió con representantes de la empresa donde apareció la amenaza y del Sindicato de Prensa Rosario. Hablaron sobre el hecho en sí y sobre un dato que ya maneja el fiscal Federico Rébola sobre un ataque a tiros contra la emisora televisiva durante el fin de semana largo que finalmente no sucedió.

"Cualquier hecho preocupa, pero este tiene una connotación diferente. Hace varios días atrás se habló de generar atentados en Rosario, por lo que siempre hay que estar alertas y no minimizar estas instancias", consideró. 

De este modo, atribuyó estas inéditas promesas de escarmiento que profiere el crimen organizado a lo que su gestión de gobierno hace por la seguridad pública, un tópico que en su momento también esgrimían funcionarios del Frente Progresista cuando gobernaba mientras recrudecía la disputa narco del territorio y quedaba cada vez más en evidencia la corrupción policial. 

"Sin dudas que las acciones que se llevan adelante –afirmó Perotti ayer– incomodan al delito, molestan y le generan complicaciones, hay muchas detenciones. Esto tiene sus reacciones y es parte de lo que estamos viviendo en Rosario", interpretó.

Por otra parte, reprochó al Poder Judicial haber ordenado el retiro de inhibidores de señal telefónica en la carcel de Coronda, a través de una medida cautelar solicitada por la defensa de detenidos. Dijo esto ante la consulta sobre numerosas órdenes que algunos detenidos imparten desde intramuros a cómplices en libertad para que continúen cometiendo delitos y sosteniendo negocios ilegales a fuerza de violencia armada. 

Comentó el desarrollo tecnológico encomendado a la empresa Invap para establecer un sistema de inhibidores de señal de alto poder. "Hubo otros en Coronda algunos años atrás, pero por una cautelar hubo que retirarlos y llevarlos a Piñero, y no cumplen ya el propósito", lamentó Perotti y estimó que el nuevo sistema deberá estar listo en tres meses.

"La Justicia tiene que analizar seriamente lo que se debe hacer y lo que no. No hablamos de alterar el vínculo del detenido con sus familiares para facilitar su reinserción; hablamos de otra cosa: presos de alto perfil que se valen de esas comunicaciones para generar hechos delictivos graves. Y así se distorsiona la secuencia del delito: la cárcel sirve de inicio al delito, en lugar de ser la instancia donde el que altera la convivencia paga por ello y empieza a recuperarse, para tranquilidad social", planteó.

Por consiguiente, y desde su punto de vista, Perotti llamó a "dejar la hipocresía de lado. Hoy la sociedad reclama ser cuidada". "¿Qué mensajes estamos dando si hacemos tanto esfuerzo para tener el mayor número de detenidos en la cárcel, pero desde allí nos siguen generando delitos?".

Rimoldi con el SPR


El ministro de Seguridad, Rubén Rimoldi, recibió ayer a una delegación del Sindicato de Prensa Rosario. Según divulgó luego la entidad gremial, "se comprometió a atender varias cuestiones solicitadas: la principal, llegar hasta los responsables de la amenaza y por otra parte que la presencia policial en los operativos esté garantizada hasta que lxs periodistas finalicen las coberturas, algo que no ocurre casi nunca". 

Rimoldi habló también de la reciente creación de una Secretaría de Abordaje Territorial, de manejo político, que tendrá a cargo la escena de los hechos donde haya ocurrido un delito o se realice un operativo, una vez que se retire el personal policial y a la que también podrá recurrirse para la realización de notas. Por último informó que los medios de comunicación tendrán custodia especial, con móviles circulando permanentemente o en las puertas de los mismos. El compromiso fue además el de mantener el contacto permanente.

Por otra parte, hubo más expresiones de condena a la amenaza mafiosa contra la prensa rosarina, como el espacio Soberanos Rosario. "En el manto de violencia que asuela a la ciudad, los más damnificados son los habitantes de las barriadas más humildes. Denunciamos la ausencia del Estado en la contención socio económica que sufren los más vulnerables, como el principal causante de estos hechos", dijeron en un comunicado.

También se expresaron las 62 Organizaciones Peronistas de Rosario, en solidaridad con los trabajadores de prensa. "Rosario está amenazada", dijeron, y exigieron "una profunda investigación, porque los poderes democráticos deben dar la respuesta".