Aunque tiene una medida de restricción para no acercarse a ella ni a sus tres nenas a menos de 180 metros, un hombre sorprendió a su ex pareja en una esquina de Morón, por la espalda. Ella agarró a sus nenas de la mano y salió corriendo hasta entrar en un templo judío, donde fue protegida por el rabino. La mujer, Adriana Toporovskaja, ya había denunciado la ausencia de resortes judiciales que protejan a las mujeres. En dos notas publicadas por este diario en mayo y octubre de 2016, relata el calvario por el que pasa. Ahora, suma una nueva denuncia por la inutilidad de ciertas medidas cumplidas para decir que se hace.

Gustavo Melnek, el denunciado, trabaja como colectivero en una línea que pasa frente a la tienda comercial de Toporovskaja. “El tipo estaba al lado nuestro cuando tiene una orden de restricción. Orden que es por 180 días y que la conseguí gracias a Vilma Ripoll cuando nos reunimos el 6 de diciembre. Le pedí que hiciera algo porque la orden que tenía vencía el 13 de enero y yo no puedo andar atrás de los papeles todo el tiempo, porque las ordenes no se renuevan automáticamente como debiera ocurrir hasta que la situación esté saldada.” La mujer tuvo que pedir “por favor” a la fiscal Paula Hondeville ( titular de la fiscalía Número 10 de Morón, especializada en Violencia de Género) para tener una reunión, y ahí conseguí lo que nunca había conseguido, una orden por 180 días. Siempre son por tres meses.”

Igual, no le sirvió para nada.

“Después del episodio y que salí en todos los canales de televisión me llamó la fiscal Pauluk para decirme que iba a venir al negocio para hacerme algunas preguntas, como si fuera un enigma. Vino con una colega y trajo un mapa de calle para que señale por donde caminaba ese día y dónde nos había sorprendido Melnek. Le indiqué todo. Dos días después me llama y me pregunta en qué vereda caminaba. Le dije. Ah, me dijo, justo la cámara que mira a esa vereda no funciona. Me están tomando de tonta, me tendría que haber dicho mire no funciona la cámara de seguridad de esa cuadra no al revés.