La obra de María Elena Walsh dejó una huella indeleble en la historia, sus versos y melodías permanecen intactos en el inconsciente colectivo. “La señora Doña Lluvia se encontró con un señor / Le dijo, ‘No me despeines la peluquita, por favor’ / Don viento, muy prepotente, ¿saben qué le contestó? / Adivinador, adivina / Adivina, adivinador”. Si alguien lee esta estrofa o cualquier otra, resulta imposible no darle play a la música mental. Hace más de una década el Espacio Cultural Nuestros Hijos ubicado en la ex Esma (Av. del Libertador 8151) le dedica uno de los acontecimientos más importantes de su programación. En esta 12° edición, el Festival de les chiques María Elena Walsh reunirá algunas de las mejores expresiones creadas para las infancias con espectáculos de Julio Calvo, Ana Iniesta, Vuelta Canela y Los Rockan, Los Tamborcitos del ECuNHi junto a Luna Monti como invitada especial, la narradora Andrea Martinoli y susurrantes solidaries, además de espacios lúdico-didácticos, talleres, juegos y ferias en un evento que se llevará a cabo este domingo desde las 15 y que promete ser una fiesta.

Ana Iniesta

Como cada año, Los Cazurros serán anfitriones y conductores de esta jornada en la que habrá música, historias, poesía e intervenciones a la sombra de los árboles, una propuesta ideal para llevar manta, reposera y matecito. Cuando se les pregunta qué simboliza la artista en sus trayectos, Pablo Herrero asegura que MEW es una referente para todos los que se dedican a las infancias: “Su obra es para toda la familia y dejó la vara muy alta, es una presencia constante. María Elena tenía una poética que nadie logró alcanzar, de una belleza compositiva espectacular”. Ernesto Sánchez ve en ella un faro y la define como “una vanguardista, una rockera de su tiempo, a veces decimos que es como una David Bowie para todas las infancias”. Él cuenta que en sus inicios se veían algo alejados de Walsh pero, con el tiempo, se fueron acercando cada vez más: “Marcó un camino, fue una transgresora y de las primeras que dio valor al género infantil, gracias a ella dejó de ser algo peyorativo. Al escuchar sus composiciones o leer sus libros te das cuenta del amor, la dedicación y el talento con que trabajaba. Su influencia en nosotros es profunda”.

La cantante Ana Iniesta ve en María Elena a una revolucionaria cuya imaginería musical y poética funcionó de pivote para todas las generaciones venideras de cantautores y trovadores dedicados a las infancias: “Simboliza el humor inteligente, la ternura, la tristeza, un abanico de emociones hasta entonces mal tratadas para las personas más importantes de la casa”. Para Vanesa Aguirre, cantante y productora de Los Rockan, representa “la linda rebeldía”, ya que con sus letras dirigidas a públicos de todas las edades marcó “un camino de amor y disparate”. “Nuestro trabajo como banda actual para la niñez sigue sus pasos porque hacemos canciones para que disfrute toda la familia en diferentes momentos de la vida. Además, aprendimos de ella a usar letras y melodías fuera de lo común en el mundo infantil”, explica.

Para quienes trabajan con infancias, uno de los grandes desafíos es no subestimar al público, proporcionar entretenimiento y esquivar la banalidad, porque lxs niñxs suelen abordar las cosas con muchísima seriedad. “Les niñes no comen vidrio ni mucho menos, son la pata más lúcida a la que hablarle en la comunidad –afirma Iniesta–. Con ellxs no se puede mentir, es un público exigente, más cuando apuntamos a crear contenido de calidad, sensible, no apurado ni arrebatado. Lamentablemente es un gran negocio para vender productos a las familias, vemos todo el tiempo música chatarra con letras y sonidos que estereotipan y vulneran la dignidad de las niñeces, la etapa más importante y trascendente de nuestras vidas”. Herrero advierte que ningún artista debería subestimar a su público y opina que Walsh niveló hacia arriba: “Nuestras propuestas, en la forma y el modo, tienen la misma intención. Cuando pensamos una obra teatral o musical, tratamos de darle todo al público. Si uno subestima a los espectadores, se está subestimando a sí mismo”. Sánchez agrega que en este trabajo es clave “el placer, el disfrute y la responsabilidad, porque le hablamos a chicos y chicas que se están formando”.

Juan Bautista Carreras, director y co-creador de Los Rockan, explica que la consigna madre en todos sus shows es escuchar a la niñez creando una experiencia compartida con las familias. “Lxs niñxs tienen mucho para decir y el arte es un lugar ideal para alzar su voz. Nuestro gran desafío es generar espacios para que griten sus deseos y expresen su imaginación, el micrófono no es patrimonio del artista que está en el escenario. En nuestros shows no se escucha música; se canta, se baila, se dibuja, se juega, se opina, se desea, se conmueve”. Crear para las infancias es un trabajo conmovedor y sensible, Iniesta dice que lo vive como un regalo más que como un desafío: “No creo que sea posible sostenerlo sin un cotidiano con ellas como educadora. Te exige estar blanda, permeable, actualizada, creativa, lúcida, crítica”.

Las convocatorias del ECuNHi siempre son especiales porque se trata de un espacio que, gracias a la alquimia de Madres de Plaza de Mayo, transformó horror en celebración. Lxs artistas hablan de la alegría de participar y sus expectativas. Este año tiene un sabor agridulce por la reciente muerte de Hebe de Bonafini, pero la consigna dice que “el único viaje es el amor”. Herrero destaca el evento como punto de encuentro no sólo entre familias y artistas sino también entre quienes se dedican a las infancias, y recuerda: “Cuando comenzamos había nervios porque no sabíamos si el público iba a venir, si se animarían a entrar a un lugar así. Por suerte el objetivo de las Madres de transformar un lugar donde hubo espanto y dolor en amor y arte ya se asentó. Es un espacio querido por lxs chicxs, se vive alegría, amor, compañerismo, reflexión y memoria. Estamos dolidos y tristes por la partida física de Hebe, que siempre fue la punta de lanza del espacio, quien nos guió hacia la luz y el amor. Hay tristeza porque ya no la tendremos y cada vez quedan menos Madres sentadas al costado del escenario recibiendo el abrazo de lxs niñxs”.

Hebe en el medio del público. Este domingo estará en el recuerdo de todes. 

“Como cada noviembre hace doce años, la alegría es total”, sintetiza Sánchez, y asegura que ser parte de la familia del ECuNHi y del legado de las Madres es un orgullo, uno de los puntos más altos en su carrera: “Hebe dejó de estar físicamente pero está en nuestros corazones, ella es otro gran faro como María Elena. Todo el odio que han sufrido lo transformaron en amor, y uno es parte y testigo de esa transformación”. Cuando les propusieron conducir y actuar en el Festival, entraron por primera vez a la ex Esma y todavía recuerdan la emoción, el escalofrío, las contradicciones. “Hace doce años a muchos amigos y conocidos ni se les ocurría pisar ese lugar, pero hoy la gente va feliz. Creo que eso es ganarle al odio”.

Carreras comparte la celebración de participar en un festival que resignifica ese espacio de oscuridad en uno de arte, amor y color: “Para mí tiene una importancia muy especial porque tuve un familiar que estuvo en cautiverio en ese lugar, entrar ahí no fue fácil pero la energía del festival, su gente y María Elena lograron transformar el dolor en sanación”. Iniesta también menciona la partida de Hebe y apuesta a “un número musical que transmita a les niñes su pertenencia a la historia, cómo fuimos y somos capaces de habitar el Nunca Más”. La artista alude al presente difícil en Latinoamérica y el mundo, pero celebra la posibilidad de reunirse con la memoria y la alegría en las canciones, en un festival que es “un evento formador para las infancias y sus familias”.

* Más información en ecunhi.com.ar. La entrada es libre y gratuita. No se suspende por lluvia.

Una canción, una historia

Las canciones muchas veces simbolizan una emoción, nos llevan a un recuerdo y representan un pedazo de vida. Lxs artistas eligen su canción favorita de María Elena y explican por qué.

*Los Cazurros: Pablo dice que en su casa sonaban mucho los trabajos para adultos entonces “Como la cigarra” es una canción que lo lleva directo a la infancia. “Yo tenía 9 años y en Argentina se luchaba por el regreso a la democracia. Cada vez que se entonaba esa canción, había una emoción muy fuerte en el ambiente que me quedó marcada para siempre”. Ernesto elige “El twist del Mono Liso” y confiesa que, al recordarla, le da risa. “Más allá de lo bella que es, escuchaba con mis hermanas ese estribillo que decía ‘La naranja se pasea / de la sala al comedor / No me tires con cuchillo / tírame con tenedor’ y era una imagen surrealista, absurda, graciosa. Recomiendo que la vuelvan a leer porque es una película maravillosa”.

*Los Rockan: La favorita de la banda es “Canción del jardinero” porque “está llena de amor y es lo que el mundo necesita: mucho, mucho, mucho amor. Tiene una melodía mágica que detiene el tiempo. Cuando suena en vivo atrapa las miradas y los oídos de todos, a veces hasta las lágrimas”. La letra habla de cuidar la tierra, de los vínculos familiares, los amigos, la lectura, la patria. “Al escucharla detenidamente te das cuenta de que esta obra de arte sólo pudo ser hecha por alguien que amaba la vida”, dicen.

*Ana Iniesta: De María Elena la marcaron muchas canciones y poesías como niña y adulta, pero elige “En una cajita de fósforos” porque es la que más la conmovió en los últimos años. La define como “un ars poética de la gran MEW” y destaca: “Es una alegría que ahora leamos este ícono de las infancias y podamos decir abiertamente que era feminista, torta, rompiendo los parámetros de ‘la artista maternal’ que pretenden los discursos conservadores que aún hoy mueven tantos hilos en las familias y en la educación”.

*Vuelta Canela: Nina Lenze recuerda que cuando era chiquita escuchaba “En el país de Nomeacuerdo” y le generaba cierta angustia, aunque no podía decir por qué. “No entendía y en el momento no me explicaron. De más grande volví a leer esa letra y comprendí que era una tristeza colectiva más que personal”. También menciona “Marcha de Osías”, que hablaba de una flor adentro de un raviol. “Yo pensaba que existían de verdad, los quería comer”, confiesa. Mariano Gora recuerda un disco del Cuarteto Zupay con canciones menos conocidas de Walsh como “Barco quieto”, y junto a Santiago Reyes destacan “La cigarra” como una que atravesó sus vidas y también a varias generaciones.

La lucha es para siempre

Por Verónica Parodi

En el ECuNHi seguimos adelante, como Hebe y las Madres nos enseñaron. Esta casa de la cultura y de la esperanza sigue abriendo sus puertas de par en par para honrar el legado de Hebe, que cambió de casa y sigue iluminando nuestro camino. “La lucha es para siempre”, nos enseñó. Con este legado poderoso seguiremos levantando el Pañuelo blanco como bandera a la victoria y la esperanza. Sosteniendo el sueño de las Madres: transformar el principal centro clandestino de detención, tortura y muerte, como fue la Esma, en un espacio de amor y vida, como es hoy el ECuNHi. Como Hebe lo soñó, esta Casa de la cultura, la educación, la inclusión social y la belleza se sigue multiplicando, como semilla, en los niños, niñas y jóvenes. Esta 12° edición del Festival María Elena será para celebrar la lucha y el legado de Hebe, y para seguir levantando su bandera.

*Dirección social educativa ECuNHi.