La Guardia Urbana Municipal clausuró la sede del club Guillermo Tell, en Hilarión de la Quintana al 500, luego de que agentes de la Policía de Investigaciones realizaran un allanamiento y descubrieran el desarrollo de un espectáculo sin la debida habilitación. El procedimiento ocurrió el sábado por la noche, durante el transcurso de un programa de catorce peleas de artes marciales, kick boxing y full contact, entre otras disciplinas. Los púgiles combatían en un ring cercado por rejas que daban la apariencia de una jaula, observaron los inspectores. Asimismo, descubrieron que la boletería era atendida por dos menores de edad. Por orden de la jueza de primera instancia en lo penal de Faltas Delia Paleari, la policía arrestó a un hombre de 38 años como responsable de la función, clausuró el legendario club de la zona sur y secuestró la jaula.