Este lunes se llevó a cabo la última jornada de la audiencia pública que debatió el proyecto para habilitar la navegabilidad con fines turísticos y recreativos de un tramo del Riachuelo. La iniciativa impulsada por Acumar prevé la apertura de la navegación en el tramo que va desde el "kilómetro 0" de la cuenca, a unos cien metros de la Autopista Buenos Aires-La Plata, hasta el puente transbordador Nicolás Avellaneda. Durante la audiencia expusieron funcionarios de Acumar y ciudadanos que se manifestaron en mayor medida en favor de la habilitación.
Entre las dos jornadas de la audiencia expusieron más de 50 personas y, en su mayoría, lo hicieron a favor de la iniciativa que busca retomar las navegaciones suspendidas desde 2011, en el marco del expediente judicial por el saneamiento del Matanza-Riachuelo, conocida como "Causa Mendoza". El presidente del organismo, Martín Sabbatella, sostuvo que "es una gran responsabilidad llevar adelante estas audiencias, donde podemos escuchar a quienes, al igual que Acumar, quieren una cuenca mejor. En este caso, la idea de retomar las navegaciones habla también de comenzar a construir una nueva etapa que nos permita revincularnos con el Riachuelo".
La presidencia de la audiencia estuvo a cargo del director general de Gestión Política y Social de Acumar, Antolín Magallanes, y contó también con la presencia de Fabio Márquez, director de la Comisión de Participación Social. El primer expositor de esta segunda jornada fue Fernando Czarny, quien calificó de "positivo" al proyecto y aseguró que la zona de Caminito puede ser "un foco de navegabilidad".
Marcela Dabas, licenciada en Oceanografía y docente de la Universidad de Buenos Aires (UBA), se mostró a favor de reestablecer la navegación y explicó que "regulando el calado estático y dinámico se puede navegar el río sin riesgo". Asimismo, señaló que la navegación "no va a impedir ni a comprometer que continúen los avances en la recuperación de la calidad ambiental del ecosistema fluvial".
Para Fabiana Valgiusti, vecina y remera del Club de Regatas Almirante Brown, el agua "está en mejores condiciones, veo en los márgenes el paisaje emergente que realmente es bellísimo". La vecina pidió, en tanto, que se pueda navegar "toda la cuenca". En la misma línea, Maximiliano Nenna, otro vecino, planteó que "hoy Acumar nos invita a soñar con un Riachuelo activo, con nuevos paisajes", al tiempo que advirtió que el turismo "puede surgir de la comunidad y fortalecer sus recursos patrimoniales en vez de alienarlos. No queremos repetir el modelo for export vigente".
Otro de los oradores fue Fabio Oliva, arquitecto y urbanista, quien subrayó que "este primer tramo debe enmarcarse en un camino que vaya por la navegabilidad total" y marcó la necesidad de "favorecer la economía popular en clara oposición a los procesos de gentrificación en marcha en la ciudad de Buenos Aires". Entre las voces que se opusieron al proyecto, Alfredo Alberti, presidente de la Asociación de Vecinos La Boca (Avlb) y miembro del cuerpo colegiado en la causa Matanza Riachuelo, aseguró que recuperar la navegabilidad es "un disparate" porque el Riachuelo es "uno de los diez ríos más contaminados del mundo".
La última oradora de la lista fue Marta Noemí Sanagua, vecina de La Boca y militante en la organización popular Los Pibes, quien apuntó que el proyecto "es bueno, pero también hay que seguir descontaminando nuestro río. Hay familias que tienen problemas de salud por los desechos que siguen tirando algunas fábricas". También solicitó que la navegabilidad se abra "en el canal Magdalena para construir más fuentes de trabajo y que los pescadores vuelvan a activarse".
En una primera etapa, la propuesta busca recuperar la navegabilidad de la cuenca en una zona acotada entre el "kilómetro 0" del Riachuelo y el Puente Transbordador, en el barrio porteño de la Boca, que abarca unos 350 metros. La Audiencia finalizó pasadas las 13 y con los testimonios expuestos se elaborará un informe final que estará disponible en la web del organismo en no más de 30 días.