El cine no atraviesa su mejor momento. Flanqueado por los coletazos de la pandemia y los cambios en el consumo audiovisual generados por el streaming, el negocio de la exhibición intentará recuperar terreno perdido ofreciendo durante 2023 un carta con platos muy similares a los que permitieron que 2019 fuera uno de los años con mayor recaudación de la historia: superhéroes al por mayor, franquicias ultra conocidas por el público, un puñado de exponentes del cine de terror –que por su bajo costo de producción y una grey fiel resulta un negocio redondo–, los últimos trabajos de directores reputados (justa o injustamente) en Hollywood y algunos títulos que, por su sinopsis, prometen, sino ser buenas, al menos romper con los moldes preestablecidos del mainstream más adocenado. A continuación, entonces, qué esperar de Hollywood en la cartelera argentina durante la primera parte de 2023.

M3gan (19 de enero): Con su productora Blumhouse, Jason Blum se ha convertido en un referente indiscutible del cine de los gritos y los sustos. Lo mismo que James Wan, cabeza creativa de la saga El conjuro. Ambos producen esta película centrada en una muñeca creada a través de inteligencia artificial por una mujer que, ante la obligación de hacerse cargo de su sobrina huérfana de ocho años, decide programarla para que oficie de cuidadora.

Babylon (19 de enero): Cuando La La Land empardó el récord de 14 nominaciones para el Oscar que ostentaban Titanic y La malvada, el jovencito Damien Chazelle (31 años en ese momento) se erigió como el nuevo niño mimado de la Academia. Su brillo, sin embargo, no duró demasiado, pero ahora intenta volver a los primeros planos con esta superproducción ambientada en Los Ángeles en la década de 1920 y protagonizada por Brad Pitt y Margot Robbie, que sigue el ascenso y la caída de múltiples personajes durante los inicios de Hollywood.

Los Fabelman (26 de enero): Como otros tantos directores durante la pandemia, Steven Spielberg aprovechó la introspección del aislamiento para delinear esta historia de indudable raigambre autobiográfica centrada en un jovencito que descubre un secreto familiar devastador y explora cómo el poder de las películas puede ayudarlo para ver la verdad. Con Michelle Williams, Paul Dano y Seth Rogen.

Llaman a la puerta (2 de febrero): Las películas del indio-estadounidense M. Night Shyamalan podrán ser buenas o malas, pero debe agradecérsele su persistencia para imprimirle un toque personal a historias que, en otras manos, se tirarían de cabeza a la autoconciencia delirante del cine clase B. El último trabajo del responsable de Sexto sentido y El protegido es un thriller psicológico sobre una familia que, mientras vacaciona en una cabaña remota, es tomada como rehén por cuatro extraños que aseguran que el apocalipsis es inminente.

Los espíritus de la isla (2 de febrero): Hay olor a Oscar en esta nueva reunión entre el realizador Martin McDonagh (Tres anuncios para un crimen) y los actores Colin Farrell y Brendan Gleeson casi quince años después de Escondidos en Brujas. La dupla interpreta a dos amigos que dejan de serlo cuando uno de ellos corta el vínculo sin motivo aparente, obligando al otro a esforzarse para intentar reconstruir la relación.

Tár (9 de febrero): Desde que ganó el Premio a Mejor Actriz en el Festival de Venecia, se dice que Cate Blanchett podría llevarse su tercer Oscar y alcanzar el récord hasta ahora compartido por Meryl Streep y Frances McDormand. El vehículo para su lucimiento es este regreso a la dirección de largometrajes del actor Todd Field luego de quince años, en el que la australiana interpreta a la compositora Lydia Tár en vísperas de la grabación de la sinfonía que podría cambiar el curso de la carrera. Su hija adoptiva, Petra, tiene un papel clave en la tarea, a la vez que será un apoyo emocional importante para su madre en apuros.

Tár.

Ant-Man and the Wasp: Quantumania (16 de febrero): El telón superhéroico 2023 se levanta con la tercera entrega solista de Ant-Man (Paul Rudd), que encuentra al personaje atrapado con su familia en la dimensión alternativa Quantum Realm. Coprotagonizada por Evangeline Lily, Michael Douglas y Michelle Pfeiffer, la película marca el inicio de la Fase 5 del Universo Cinematográfico de Marvel.

Ant-Man and The Wasp: Quantumania.

Imperio de luz (23 de febrero): Otra con olor a Oscar de un director que sabe cuánto pesa la estatuilla. Protagonizada por Olivia Colman, Micheal Ward, Colin Firth y Toby Jones, el último trabajo de Sam Mendes (Belleza Americana y 1917) propone una historia de amor ambientada alrededor de un hermoso cine antiguo en la costa sur de Inglaterra, en la década de 1980.

Creed 3 (2 de marzo): El prejuicio indica que una película vinculada al universo de Rocky sin Sylvester Stallone en pantalla es como un asado sin carne, pero en honor y por respeto al boxeador de Filadelfia, habrá que darle a una oportunidad a esta tercera entrega del spin-off centrado en el hijo de Apollo (el aquí también director Michael B. Jordan), quien en esta ocasión se cruza con un amigo de la infancia y ex promesa del deporte de los guantes para un nuevo enfrentamiento.

Shazam 2: La furia de los Dioses (16 de marzo): Mientras Disney sigue al pie de la letra la hoja de ruta trazada para el UCM, Warner intenta encontrar un rumbo para la troupe de DC. El primer ensayo del año es esta continuación de la historia del adolescente Billy Batson, quien, al recitar la palabra mágica "¡Shazam!", se transforma en un superhéroe adulto.

John Wick 4 (23 de marzo): Si alguien en 2013 se paraba en el Obelisco a gritar que Keanu Reeves volvería a ser una estrella del cine de acción, seguramente hubiera terminado con un chaleco de fuerza. Uno de los éxitos más impensados de la última década, la saga comandada por el ex doble de riesgo devenido en (muy buen) director Chad Stahelski presenta su cuarta entrega, en la que el hitman retirado vuelve al ruedo para hacer lo que mejor sabe: revolear piñas, patadas y cuando objeto se le cruce y disparar todas y cada una de las armas existentes contra un grupo de malhechores dispuestos a joderle la vida.

John Wick 4.

Oso intoxicado (23 de marzo): La nueva incursión de la nunca del todo valorada actriz Elizabeth Banks (Zack y Miri hacen una porno) se gana un lugar en este panorama porque está inspirada en un hecho real increíble, digno de una mente quemada: en 1985, un oso encontró un cargamento de decenas de kilos de cocaína en un avión narco estrellado y no tuvo mejor idea que comérselo, desatando así una persecución para detener al animal con síndrome de abstinencia. Como yapa, será la última oportunidad de ver en cines al enorme Ray Liotta, fallecido en mayo del año pasado.

Guardianes de la galaxia Vol. 3 (4 de mayo): Hace ya ocho años que llegó la primera entrega de una saga que apuesta por el humor absurdo y altas dosis de aventuras despreocupadas. Luego de una segunda película que menguó los entusiasmos, es hora de este protagonizado por Chris Pratt, Zoe Saldana y Dave Bautista y dirigido por el flamante jefe de DC Studios James Gunn, en lo que será su despedida del mundo Marvel.

Rápidos y furiosos X (19 de mayo): Una película que, a estas alturas, no necesita presentación. Más de veinte años después del debut en la pantalla grande, Dominic Toretto (Vin Diesel) y el resto de la troupe continúan con sus aventuras vehiculares –hace tiempo que dejaron de manejar solo autos– al comando del director taiwanés Justin Lin. La décima entrega marca el ingreso a este universo de Jason Momoa.

La Sirenita (25 de mayo): La cenicienta, La bella y la bestia, El rey León, Aladdín, Dumbo…Disney continúa revolviendo el cofre de sus tesoros para traerlos al presente con versiones live-action, esto es, con actores de carne y hueso. Acorde a los tiempos que corren, la afroamericana Halle Bailey encarnará a la sirena que se enamora de un humano y hace un trato con la malvada Úrsula para poder caminar.

La Sirenita.

Spider-Man: A través del Spider-Verso - Parte Uno (1º de junio): la animada Spider-Man: un nuevo universo transformaba un concepto de sinergia comercial en un proyecto inteligente y divertidísimo, con plena autoconciencia de las incoherencias de ese vale todo que es el multiverso. Protagonizada por un joven afrolatino que recibe un brebaje para desarrollar poderes y descubrir los portales hacia otras dimensiones, la película estaba dirigida por Phil Lord y Christopher Miller, que desde Lluvia de hamburguesas venían demostrando una imaginación fulgurante. ¿Podrán repetir sus reemplazantes, Joaquim Dos Santos y Kemp Powers?

Transformers: el despertar de las bestias (8 de junio): A seis años de la quinta película basada en los juguetes y cinco de ese muy amable spin-off que fue Bumblebee, parecía que los enfrentamientos entre los Autobots y los Decepticons habían llegado a su fin. Pero nunca hay que dar por muertos a estos vehículos capaces de convertirse en robots para, claro, salvar a la humanidad. Con Steven Caple Jr. reemplazando a Michael Bay en la dirección, El despertar de las bestias sigue a un par de arqueólogos que, en 1994, se enredan en un conflicto que involucra todas las facciones de Transformers.

Elementos (15 de junio): Es cierto que la lamparita del velador de Pixar ya no alumbra como en sus mejores épocas. Pero el peso de la historia del estudio detrás de Toy Story, Cars y Buscando a Nemo es demasiado grande para no apostar unos mangos por esta película que transcurre en una ciudad donde conviven el fuego, el agua, la tierra y el aire y en la que una joven llena de fuego y un joven que se presenta como su opuesto perfecto descubren que tienen mucho en común.

Flash (15 de junio): Y un día, Flash es noticia por su estreno y no por los escandaletes policiales de su protagonista, Ezra Miller. El debut en el universo de los encapotados del realizador argentino Andrés Muschietti sigue a este personaje durante su viaje por una línea temporal en que la Tierra está en crisis y sus héroes, perdidos o dispersados.

Phoebe Waller-Bridge y Harrison Ford, una nueva Indiana Jones.

Indiana Jones y el llamado del destino (29 de junio): Si todos vuelven, ¿por qué no habría de hacerlo el arqueólogo más famoso del mundo? Su regreso suena a maniobra de explotación comercial, pero la dirección a cargo de James Mangold (Wolverine, Ford vs. Ferrari) y una dupla protagónica tan improbable como Harrison Ford y Phoebe Waller-Bridge (sí, la de Fleabag) son indicios de que la cosa podría ser mucho más que una excusa para vender pochoclos.

Misión imposible: Sentencia mortal (13 de julio): Como los buenos vinos, Tom Cruise mejora con el tiempo. Y le pone el cuerpo a sus películas. Literalmente: así como manejó los cazas de la reciente Top Gun y supo colgarse de un avión mientras despegaba para la anterior Misión imposible, hace algunas semanas circularon imágenes de una escena –que repitió ¡seis veces! – que lo tiene tirándose desde un precipicio con una moto. La séptima entrega de las aventuras del agente Ethan Hunt promete cine físico en su acepción suprema.

Barbie (20 de julio): Tuvieron que pasar más de sesenta años desde su creación para que la muñeca hegemónica por excelencia llegara a la pantalla grande. Lo hará de la mano de Greta Gerwig en la dirección, la misma que en 2019 entregó una relectura magnífica y moderna de Mujercitas, y con dos protagonistas que dan perfecto con el pysique du role como Margot Robbie y Ryan Gosling. ¿La sinopsis? Una muñeca que vive en BarbieLand es expulsada de la comunidad por no ser lo suficientemente perfecta y se embarca en una aventura en el mundo real.

Barbie.

Oppenheimer (20 de julio): El británico Christopher Nolan viaja por segunda vez hasta la época de la Segunda Guerra Mundial (ya lo había hecho en Dunkerque, sobre la batalla homónima y el posterior rescate) para narrar la historia del científico J. Robert Oppenheimer y su rol en el desarrollo de la bomba atómica. Protagonizan Cillian Murphy, Emily Blunt y la omnipresente Florence Pugh.