“El duelo es algo que tendrás que llevar contigo por el resto de tu vida, a pesar de lo que ciertas personas o nuestra cultura quieren que creamos. No lo superás, no seguís adelante, punto”, le dijo Lisa Marie Presley a la revista People hace unos meses, en la que a partir de la tarde del jueves 12 de enero fue su última entrevista. La hija de Elvis Presley murió en un hospital de Los Angeles, tras sufrir un paro cardíaco. Tenía 54 años. La noticia la confirmó su madre, Priscilla, a través de un comunicado: “Es con gran pesar que debo compartir que mi bella hija Lisa Marie se ha ido”, avisó su progenitora horas después de que publicara en su cuenta de Instagram que la cantante, actriz y compositora se encontraba internada en un centro médico. Al mismo tiempo que pedía a sus seguidores que oraran por ella, describió a su hija como la “mujer más apasionada, valiente y amorosa” que conoció”. El posteo estuvo acompañado por una foto de ambas.

Su fallecimiento sucedió de manera inesperada. El martes había asistido como invitada, junto a su madre, a la entrega de los Globos de Oro, por la producción de la película Elvis. Austin Butler, quien encarna a su padre en el biopic dirigido Baz Luhrmann, se llevó el premio al mejor actor. Durante su discurso, agradeció a la familia del llamado “Rey del Rock and Roll” por darle la oportunidad de hacerse con su papel más importante hasta la fecha, lo que lo convierte en el gran candidato a llevarse el Oscar. Lisa Marie estaba tan satisfecha con esa encarnación que en la previa de la ceremonia dijo a los mediosque lo que había hecho Butler era “increíble”, “acertado” y “auténtico”. El pasado domingo, y como solía hacer todos los años en el natalicio de su padre, visitó Graceland, la legendaria mansión en la que vivió con el icónico cantante hasta los 4 años (luego se mudó, a partir de la separación de sus padres).

Una vez que se conoció la noticia de su defunción, comenzó a circular la información de que durante la entrega de los premios que concede la Academia de la Prensa Extranjera de Hollywood a Lisa Marie no se le vio bien. Mientras era entrevistada, le advirtió a Jerry Shilling, un viejo amigo del padre que también asistió al evento, que debía agarrarlo del brazo. Si bien se mostró coherente, lució “desnutrida”, “angustiada” y “frágil”. Fue su asistente quien la encontró inconsciente el jueves en la mañana en su hogar en Calabasas, ciudad ubicada a 50 kilómetros del centro de Los Angeles y en la que residen varias celebridades de Hollywood. La hija de Elvis no respiraba cuando los paramédicos entraron en la casa. La Oficina del Sheriff informó que el personal de emergencias debió practicarle masaje de reanimación cardiopulmonar, antes de trasladarla al hospital del condado.

Luego del fallecimiento de Elvis, en 1977, a los 42 años, Lisa Marie estableció una relación especial con la muerte. Lo reconoció en 2003 en una nota a Rolling Stone. “Me obsesioné con ella desde muy joven”, dijo a la revista. Y más tarde, en otro medio, reveló: “He lidiado con la muerte, el dolor y la pérdida desde que tenía 9 años. He tenido más de la cuenta en mi vida y, de alguna manera, he llegado hasta acá”. En 2020, el suicido de su hijo Benjamin, a los 27 años, fue tan devastador para ella que nunca se pudo recuperar. Y es que lo consideraba el amor de su vida. Lo enterró en Graceland (la mansión se encuentra ubicada en la ciudad de Memphis), donde también reposan los cuerpos de su abuelo y bisabuelos. Era el segundo de los hijos que tuvo con el compositor Danny Keough, su novio en la secundaria. La mayor se llama Riley, quien hoy tiene 33 años y es actriz.

A Riley pronto se le podrá ver en la adaptación de Amazon del libro para adolescentes Daisy Jones & The Six, basado en un grupo de rock ficticio de los años '70. La primogénita de Lisa Marie reconoció que se inspiró en su madre al momento de sumergirse en el papel. También tuvo dos hijas más, las mellizas Harper y Finley, fruto de la relación con el músico Michael Lockwood. Tras diez años de convivencia, la pareja se divorció en 2016 protagonizando una batalla legal por la custodia de las niñas. Anteriormente, estuvo casada con el actor Nicolas Cage y con Michael Jackson. Con el “Rey del Pop” se casó en República Dominicana, dando inicio a una relación que no pudo sortear la mediatización. Luego de separarse, siguieron cultivando el vínculo, incluso como amantes. De hecho, ella salió a defender a su ex cuando se le acusó de haber abusado de un menor.

Lisa Marie Presley debutó muy tarde en la música, a comienzos de la década de los 2000, debido a la expectativas que pesaban sobre ella. Desde su nacimiento, nueve meses después de que sus padres se casaran, nunca conoció lo que era la intimidad. “Mis padres eran dos personas realmente fuertes. De él heredé seguramente el humo. El sentido común y la fuerza vienen de ella. No estoy diciendo que él no los tuviera, pero ella piensa muchísimo más las cosas”, confesó en una entrevista. Al momento de hablar del “Rey del Rock and Roll” siempre fue oscilante. Por momentos era muy cariñosa y comprensiva, y en otras ocasiones no era tan condescendiente. Lo cierto es que al morir tanto él como sus abuelos paterno se convirtió en la herdera de toda su fortuna, al igual que de Graceland. A partir de ese entonces, se tornó una adolescente problemática.

Sin embargo, sus adicciones se agudizaron tras el parto de sus mellizas. Sufrió tanto dolor que se hizo dependiente de los tranquilizantes y opiáceos. Introducida en la Cienciología por John Travolta, tomó distancia de ese culto en 2016. Cuatro años antes sacó el que es ahora su último álbum de estudio: Storm & Grace. Antes había publicado secundando a los discos Now What (2005) y To Whom It May Concern (2003). Fue el productor Glen Ballard, responsable de varios éxitos de Alanis Morissette, quien la animó a darle forma a esas canciones iniciales que decantaron en un debut al que le fue muy bien. Así como sucedió con su vida en si, Lisa Marie buscó su identidad artística al tiempo que probaba varios estilos musicales. Y en 2007, para conmemorar los 30 años de la muerte de su padre, apeló a la tecnología para interpretar a dúo un éxito de Elvis de 1969: “In the Ghetto”. Si existe el Edén, ahora mismo deben estar cantándolo cara a cara.