El fútbol argentino regresó de la mano de la Liga Profesional y, como siempre, en Peligro de Wolf vamos a citar a sus protagonistas. Por empezar hay que decir que la AFA está más loca que una Cabral. ¿Cómo va a empezar el torneo un Díaz de enero? En esta época la gente se Marchi de vacaciones. De hecho, hace dos Domínguez yo Armani las valijas y me fui en mi moto Rojas a la Acosta, Más precisamente a Villa Gesell. Me esperaba Adela, una antigua amiga del Barrios, cuya familia tiene allí una Quintana. Paradela fue un Valdez de agua Frías, porque me esperaba la noche anterior. Llegué al Díaz siguiente, a las 8 de la Mammana porque en la ruta, a la altura de Varela, con mi moto Márquez Guerrero, debí Esquivel a un Gattoni y me Metilli en un Pozzo. Me di un Opazo fuerte, suerte que llevaba el Casco.

La cuestión es que tuve que Sigali caminando como 10 kilómetros como si fuera un Pellegrino a Luján. Ni bien llegué a la Villalba, la familia de Adela me recibió como un Rey o un Sultani: me dio de Komar un asado a la Carbonero que me quitó el Ambroggio y me Servio un Martino con hielo. Asís fue que durante una semana con Adela jugamos al Candia Crush, miramos algún Oviedo de Vázquez en un Canale de Youtube y con los Díaz, como me daba Rébola le dije que la amaba una Bochi, que me ponía Alegre su Compagnucci, que sus Ojeda brillaban como un Lucero, que era un Tesuri y deseaba que se Cazares conmigo y que me gustaría que vayamos en Barco a París a conocer la Torrén Eiffel.

Pérez claro, eso en otro momento, en Mallo o junio. Ahora tenía que volverme a Buenos Aires para Vera River, no me quería perder ningún Goltz de Borja. Entonces se puso Cabrera, me Retegui como a un Chicco, me gritó que era un Pillud y me hizo la Cruz. “Si te Garro te mato, Roffo, no sé cómo pude Diarte bola”, me dijo y me dio una Pignani que me hizo caer de Ortiz y me Fattori la Gamba. Ahora debo Andújar con Mulet.

Chaves cómo es la vida. Pasás de tener Tobio a tener Menossi. No Godoy más del dolor. Pero, según mi Lema, el fútbol bien lo vale.