La presidenta de la Junta de Investigación de Accidentes de Aviación Civil, Pamela Suárez, dijo ayer que la desaparición de la avioneta aún no estaba calificada como accidente aéreo y en que se está haciendo una búsqueda intensiva.

Gustavo Brea, asesor de la junta y experto en helicópteros, reconoció que el operativo de búsqueda “no es fácil”. Y recordó el caso de la familia Pomar, accidentada en una ruta bonaerense, a la que también buscaron por días sin resultado. Ambos insistieron en que hasta el momento la avioneta técnicamente no está accidentada, sino “perdida”. 

Respecto del audio que trascendió, del cual se deduce que la nave estaba volando sin ubicación, ambos dijeron que “la investigación no se puede basar en trascendidos de WhatsApp”. “Puede haber un problema con la radio y no se escuchó ninguna emergencia”, admitió Brea.

Suárez dijo que la junta sólo actúa en caso de que se notifique un accidente. “Hay que encontrar la aeronave. Dejar trabajar a la gente que está haciendo la búsqueda. Darles contención y apoyo a los familiares. Y después trabajar en una investigación en caso que se configure un accidente de esta situación”, concluyó.