Los docentes porteños, nucleados en Ademys, confirmaron públicamente que no iniciarán las clases el próximo lunes una vez que finalice el receso invernal. Desde el gremio destacaron que el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta les hizo un ofrecimiento salarial que “queda por debajo de la línea de pobreza” y anunciaron un paro de 24 horas que también incluirá una movilización a las 11 al ministerio de Educación.

En la última mesa salarial del 13 de julio, la cartera que dirige Soledad Acuña, propuso un incremento que asciende al 21,5 por ciento y un bono de 1200 pesos por cargo, a pagar en tres meses- noviembre, diciembre y enero. Los principales sindicatos, Ademys y UTE rechazaron la propuesta por considerarla “insuficiente” porque consideran que el aumento no se condice con los aumentos en la canasta básica y los servicios de este último año. Además denuncian que el cobro de ese monto extra en tres cuotas sería “en negro” y que tampoco tendría validez para la negociación salarial del próximo año, ya que no se es extensiva y termina en el primer mes del año que viene.

Después de la reunión, Ademys había determinado que si no llegaba una propuesta superadora antes del reinicio de clases no se presentarían en las escuelas. “En asamblea hemos decidido que la medida no se va a modificar y no se inician las clases en la ciudad de Buenos Aires”, expresó esta mañana el secretario general del gremio, Jorge Adaro, durante la conferencia de prensa.

Adaro hizo además un llamado al resto de los gremios a que acompañen la jornada de paro y movilización porque, hasta ahora, los docentes de UTE concurrirían con normalidad a las aulas este lunes. En el caso del gremio que conduce Eduardo López, se pactó una semana de consulta para determinar los planes a seguir, que se decidirán en la segunda semana después del receso, en el plenario de delegados.

“Invitamos a toda la docencia de la ciudad a sumarse a esta medida porque tiene que ver por un lado con la cuestión salarial pero también con las condiciones laborales”, convocó el dirigente de Ademys, quien puntualizó en la situación particular que afrontan los docentes de lenguas extranjeras. “En este tiempo, el gobierno de la Ciudad  ha anunciado que los docentes de lenguas extranjeras van a pasar a depender de una gerencia operativa y quedarían por fuera del estatuto docente”, concluyó Adaro.