La directora Fedra García estaba comenzando la primaria en su escuela de Lomas de Zamora cuando sucedió la Guerra de Malvinas. Apenas recuerda a los chicos saltando en el patio al ritmo de “el que no salta es un inglés” o el pedido de redacción de cartas para los soldados. De su primera infancia dos sucesos muy diferentes le quedaron sobreimpresos, los cantos en contra de la invasión británica y la llegada de la democracia. Años después, ella misma descubriría que la expresión de los contrastes era la marca de su modo de hacer teatro.

Toda la familia de Fedra estaba en contra de la guerra: su abuelo ucraniano había participado de la del 14 y había sido prisionero de los alemanes. Fue por este motivo que, una vez que parecía cercano el comienzo de una segunda contienda mundial resolvió venirse con toda su familia a la Argentina. “A mis hijos no les puede pasar lo mismo”, había determinado. La directora sintetiza en la entrevista con Página/12: “en mi familia la guerra siempre significó el fracaso de la humanidad”. Por esto mismo le entusiasmó la convocatoria del Teatro Nacional Cervantes para realizar la puesta de Condolencias, obra de Alicia Muñoz (autora de Justo en lo mejor de mi vida), obra ganadora del primer premio del concurso de dramaturgia “Las mujeres y Malvinas”, organizado conjuntamente entre el Cervantes y la Universidad de la Defensa Nacional (UNDEF), con la colaboración de Argentores. El espectáculo se estrena este sábado a las 18 hs en el teatro ubicado en Libertad 815. 

Con música original de Miguel Pesce, iluminación de Marco Pastorino y escenografía de Micaela Sleigh, el vestuario de Rosario Díaz, según describe la directora, contrasta el tono de los acontecimientos con los colores saturados que sí concuerdan con algunas derivaciones hacia el humor. Actúan Mariano Bassi, Alejandra Darín, Tincho Lups, Roberto Vallejos y María Zubiri. “Para todo el elenco es importante contar esta historia”, afirma García, “Hicimos una construcción colectiva como un homenaje a los que murieron en Malvinas y creemos que así ayudamos a reflexionar y a seguir indagando sobre lo que pasó”. Con la misma intención de asociar teatro y memoria es que la misma directora continúa presentando en el Centro Cultural de la Cooperación su obra El vuelo de Basilio, adaptación para teatro de títeres del cuento Ad astra, de Haroldo Conti: “Hacer una obra de este autor para la infancia es una forma de hacer memoria activa”, sostiene.

Condolencias inicia su relato10 años después de la finalización del conflicto armado. Sin embargo, el personaje de la madre tiene la esperanza de encontrar a su hijo porque la carta de condolencia oficial que recibió en su momento contenía un error: su segundo nombre era otro. “La vuelta al hogar después de la guerra es un tema que está muy presente en la literatura y en el cine”, subraya la directora, quien decidió incluir entre las escenas la lectura de pequeños fragmentos de Diario de Malvinas, texto escrito en 1829 por María Sáez de Vernet, esposa del primer gobernador argentino que tuvieron las islas. “Un toque documental para una obra de ficción”, define la directora.

-¿Cómo fue tu primera lectura de la obra, cómo comenzaste a trabajarla?

-Cuando leo una obra voy registrando las boyas emotivas porque son para mí las llaves para pensar la puesta. Luego estudio mucho. Y como si fuera una directora de orquesta voy armando la partitura de la totalidad. Busco encontrar espesor para el material, contarlo desde diferentes perspectivas. Es que entre el texto escrito y la puesta hay una gran distancia, se arma otro mundo.

-¿Qué características tiene esta puesta?

-Organicé la obra en tres actos, cuidando de no contar la historia en forma lineal. Los actores están todo el tiempo en escena, no hay una lógica espacial y, como hay elipsis temporales, la obra no tiene nada de costumbrista. Fuimos cuidadosos y apostamos a la delicadeza y a la ternura.

-¿Cuáles son las perspectivas desde donde se cuenta esta historia?

-El personaje de la madre necesita encontrar a su hijo, pero también buscan respuestas el padre y la que fue la novia. Y como todos necesitan reparar algo que está fragmentado y están anhelando abrazar a alguien que está ausente, ponen esta ausencia en otra persona, como en un juego fantasmático. Ante un trauma así, cualquier persona apela al mecanismo de la negación.

*Condolencias, Teatro Cervantes (Libertad 815), de jueves a domingo, a las 18 hs.