Las repetidas interrupciones del servicio eléctrico y las jornadas con baja tensión podrían afectar los sistemas de elevación, como ascensores y montacargas y, eventualmente, provocar graves y onerosos inconvenientes, señaló la Cámara Empresaria de Conservadores de Ascensores y Afines (Cecaf).

Desde la entidad lanzaron una campaña de difusión para que los consorcios, empresas o responsables de instalaciones soliciten a sus compañías conservadoras un informe pormenorizado del material, a fin de establecer si hubo consecuencias que afecten el normal funcionamiento de sus equipos.

En Buenos Aires existen más de 80.000 instalaciones registradas, con una antigüedad promedio estimada en 60 años, lo que incrementa la necesidad de no permitir que funcionen con material gastado, obsoleto o con el mecanismo eléctrico averiado producto de los cortes del suministro eléctrico que afectaron durante las últimas semanas a la mayoría de los barrios porteños y del conurbano bonaerense.

Si bien sobre ese total de ascensores registrados un porcentaje tiene instalaciones con sistemas de maniobras que poseen diferentes protecciones, el 70% son antiguas como se señala; instalaciones del tipo electromecánico que son las más proclives a sufrir inconvenientes en caso de baja tensión o cortes de suministro eléctrico.

La falta de mantenimiento por la situación económica y recorte de gastos que vienen implementando especialmente los consorcios puede convertirse en uno de los motivos por lo que se podrían producir accidentes.

Los principales responsables de los mismos son los consorcios y solidariamente responsables los administradores quienes tienen que darle prioridad a los arreglos y mantenimiento de elevadores.

"Los ascensores son el medio de transporte más usado a nivel mundial, ya que transportan a millones de personas todos los días, y por eso es necesario que vecinos y administradores de consorcios,comerciantes y todo responsables de instalaciones entiendan la importancia de tenerlos en condiciones", afirmó Nicolás Glennon, presidente Adjunto de Cecaf.

En ese sentido agregó que "por efecto de la pandemia y por razones económicas muchas veces se postergan reparaciones o cambios de repuestos y se pone en peligro la integridad fisica los usuarios, algo tan peligroso como andar con las gomas lisas o tomar como habitual que el freno del auto no responda¨.

Luego explicó que los inconvenientes ocurren por tres causas principales, como son la falta de mantenimiento; la falla de componentes por envejecimiento o roturas y el uso inadecuado por parte de los usuarios.

En la ciudad de Buenos Aires existen normativas claras en el Código de Edificación, además de especificaciones técnicas y de conservación de los medios mecánicos de elevación.

Esas normas establecen requisitos de acreditación, de conservación y de periodicidad de las inspecciones, las que pueden verificarse a través de la oblea con código QR pegadas en forma obligatoria en el interior de los ascensores.

"Subir a un ascensor 5, 10 o 20 pisos todos los días, sin que tenga las revisiones y arreglos pertinentes es tan peligroso como viajar en un colectivo al que no se le atienden los frenos o se le cambiar las ruedas en 5 años", ejemplificó Glennon.