Mauricio Macri presentó su segunda declaración jurada como presidente, esta vez alejado del escándalo internacional de los Panamá Papers. Su patrimonio disminuyó un 25 por ciento respecto de su presentación anterior, ya que Macri no incluyó en su declaración jurada los bienes que puso en un fideicomiso ciego (pese a que continúan siendo suyos). El Presidente ya enfrentó investigaciones judiciales por las incongruencias entre sus distintas declaraciones juradas y por la filtración internacional de documentos que lo asociaron a una empresa offshore que no figura en sus declaraciones. Las deudas que tenían con él el contratista del Estado y “hermano de la vida” Nicolás Caputo y el intendente de Lanús, Néstor Grindetti, fueron saldadas en el último año. A su vez, Macri se convirtió en uno de los acreedores de la deuda argentina que su Gobierno emitió en junio del año pasado. 

La declaración jurada de Macri que corresponde a 2016 incluye bienes por un total de 82 millones de pesos. Es un 25 por ciento menos que la de 2015, que ascendía a 110 millones de pesos. En la presentación anterior se produjo otra controversia dado que la de 2014 sumaba 52 millones. Desde el Gobierno argumentaron que habían cambiado la forma de calcular el valor de distintas propiedades. Con esta declaración Macri se ubica quinto en el ranking de las fortunas del Gabinete, superado por el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne (96 millones); el de Energía, Juan José Aranguren (104 millones); el de Finanzas, Luis Caputo (124 millones); y el jefe de la AFI, Gustavo Arribas (al tope, con 126 millones).

Las declaraciones juradas le han traído más de una denuncia: Macri fue imputado en una causa por presunta omisión maliciosa cuando se conocieron los documentos de Panamá Papers que lo ubicaban como vicepresidente de la offshore Fleg Trading en las Islas Bahamas, a la que luego se sumó otra offshore, Kagemusha, en Panamá. Antes de eso, en 2015, la dirigente de Nuevo Encuentro Gabriela Cerruti lo había denunciado por incongruencias entre las declaraciones juradas que había presentado como candidato a presidente y como jefe de gobierno porteño.

Ciego y oculto

Ayer Macri informó bienes por un 25 por ciento menos que el año pasado: no se debe a un empobrecimiento, sino a la constitución de un fideicomiso ciego, donde incluyó a las empresas en las que tiene acciones y que estaban valuadas en 28 millones de pesos (otras fuentes calculaban que esos bienes ascienden a 47 millones). Entre las empresas están Agropecuaria del Guayquiraro SA, Molino Arrocero Ria Guayquiraro SA, María Amina SA y 4 Leguas, compañías que se dedican a negocios agropecuarios. Tampoco figura más la empresa Yacylec, donde el Presidente había declarado acciones por dos millones y medio de pesos. Como es una empresa transportadora de energía, había sido cuestionado por los aumentos de tarifas dispuestos por su Gobierno. Según informaron en la Rosada, en ese caso, Macri cedió esas acciones a Sideco, el holding familiar. También figura en la declaración jurada un crédito por la venta de activos de Agropecuaria de Guayquiraro por 1 millón 400 mil pesos. No está claro si esto lo hizo antes de constituir el fideicomiso ciego. 

Entre las empresas que ya no informa Macri se incluyó el Fideicomiso Caminito, que tenía un valor de 19 millones de pesos. Se trata de un emprendimiento inmobiliario en La Boca, conocido como Molina Ciudad, un edificio de 65 mil metros cuadrados que fue beneficiado por la exención impositiva a partir del proyecto del Distrito de las Artes, impulsado por Macri como jefe de gobierno porteño. Esto llevó a una nueva denuncia penal por parte de Cerruti. 

La decisión de no incluir los bienes del fideicomiso en la declaración jurada generó otro debate ayer. “Desde mi punto de vista, tendría que haberlo incluido en la declaración jurada, porque los bienes siguen siendo de él”, advirtió a este diario Natalia Volosin, abogada especializada en control de la corrupción y con un master en Derecho en la Universidad de Yale. “El fideicomiso lo que hace es poner en manos de terceros la administración de los bienes, que nunca mostraron cuáles son. El fideicomiso se hizo de una manera muy opaca. Tendrían que haber puesto a disposición el contrato. Además, no es ciego: el fiduciario tendría que ser desconocido para el Presidente, y este no es el caso. Constituyó el fideicomiso con una empresa vinculada al Escribano General del Gobierno. Que no pueda tener información del fiduciario es endeble”, remarcó. “El fiduciario no tiene el poder de ceder esos bienes. Los administra. Macri sabe que tiene esos bienes: si había conflicto de intereses, lo sigue habiendo”, remarcó.

Otra parte del patrimonio que ya no figura en la declaración jurada de Macri son unas plantaciones valuadas el año pasado en 2 millones 178 mil pesos que llevan el nombre de “Masa Forest”. Según informaron cerca del Presidente, esa propiedad fue donada por el mandatario a su hija menor, Antonia Macri.

Acreedor del Estado

En las declaraciones juradas anteriores, generó otra controversia un préstamo que figuraba de Macri a Caputo, dado que este último era contratista tanto del Estado nacional como del porteño. También figuraba una deuda de Néstor Grindetti, que fue su ministro de Hacienda en el gobierno porteño y actualmente es intendente de Lanús. En el caso de Caputo el préstamo era por 22 millones de pesos, mientras que Grindetti le debía cerca de medio millón a Macri. La nueva declaración jurada mostró que los dos pagaron lo adeudado en el último año. Sus devoluciones figuran como una “transferencia por acreditar” por 26 millones 900 mil pesos. 

A su vez, Macri se dedicó a comprar parte de los bonos de deuda que su Gobierno fue emitiendo durante el año pasado. En total, las distintas compras de deuda superan los 30 millones de pesos. Incluyen títulos discount, títulos del gobierno nacional y de la deuda pública de la provincia de Buenos Aires. Como origen de los fondos, solamente incluye la “venta de activos”, aunque parte del dinero invertido serían los 18 millones de pesos que el año pasado declaró en una cuenta en las Islas Bahamas (que, previamente, en otra declaración jurada figuraba en Suiza y en Estados Unidos). También compró acciones de YPF por 3 millones de pesos.

El Presidente declaró que tiene un millón 400 mil dólares en efectivo, además de una caja de ahorro con otros 309 mil dólares. Informó también de 7779 pesos en una caja de ahorros del Banco Nación, 1055 pesos en otra del Banco Galicia y 38.092 pesos en una cuenta corriente del mismo banco. 

Entre los inmuebles, figura la finca Pluma del Pato, de 2 mil hectáreas, en el Departamento Rivadavia de Salta, valuada en 3 millones de pesos, un lote en Tandil de 5102 metros cuadrados, con un valor de 657 mil pesos, y el 25 por ciento de tres lotes en Pilar con un valor total de 1 millón 789 mil pesos. También el departamento de Libertador 2712, de 370 metros cuadrados, que le alquila al titular de la AFI.