Estados Unidos lanzó ayer un misil balístico intercontinental sin carga hacia el Océano Pacífico, a menos de una semana de que Corea del Norte lanzara un vector del mismo tipo, lo cual aumentó la tensión que domina la relación entre ambos países desde hace meses y que ya enfrentó a Washington y a China. La escalada verbal y militar entre Estados Unidos y Corea del Norte parece no tener límites. El lanzamiento norteamericano de ayer se produjo dos días después de que el presidente Donald Trump prometiera “encargarse” de Corea del Norte y apenas horas antes de que el mandatario promulgara nuevas sanciones contra Pyongyang y las empresas de terceros países que comercien con el régimen comunista, lo que impactará principalmente en la vecina China. Estados Unidos ya había anunciado que iba a probar el misil balístico intercontinental Minuteman III, sin cargas explosivas. El misil cayó en el atolón (una pequeña isla hecha completamente de coral) de Kwajalein, en la islas Marshall, en el Océano Pacífico.