El escritor estadounidense Ernest Hemingway fue absuelto de toda responsabilidad por distorsionar la fiesta de San Fermín. Sucedió este viernes en la región española de Navarra, en el marco de un juicio popular paródico. El Premio Nobel, que se suicidó en 1961, ayudó a popularizar la famosa festividad en la cual una multitud corre delante de los toros por las calles de Pamplona, como dio a conocer en el mundo en su novela The Sun Also Rises, conocida en castellano como Fiesta

Hemingway fue sometido a un simulacro de juicio humorístico en el marco de un evento celebrado en Pamplona en conmemoración del centenario de su primera visita a esta ciudad española en 1923. Durante años, existió en España un debate sobre si Hemingway y su novela habían en realidad perjudicado a Pamplona al atraer a curiosos de todo el mundo y distorsionar sus festividades, o si habían tenido un impacto positivo en la economía y el turismo de la ciudad.

El jurado, compuesto por expertos en la figura de Hemingway, concluyó que "no es culpable de provocar la masificación de las fiestas ni de desnaturalizar gravemente los Sanfermines, sino que, de manera positiva, contribuyó a darlos a conocer en todo el mundo". Sin embargo, el veredicto también determinó que la imagen de la ciudad presentada en su novela de 1926 es algo "ridícula y ofensiva".

En este juicio simulado, la fiscalía solicitaba, en un gesto irónico, un cambio en el título de su obra por No vayas a Pamplona y deja a su gente, la retirada de la estatua dedicada al escritor cerca de la plaza de toros de la ciudad, y que se borren todos los recuerdos a su figura en las calles, para dejar su legado relegado a la historia de la literatura estadounidense.

Durante el juicio público, Miguel Izu, autor del libro Hemingway en los Sanfermines, defendió que el escritor "se integró perfectamente" en la festividad y consideró "exagerado" atribuirle solo a él la avalancha de visitantes extranjeros.

Además, Tim Pinks, un inglés enamorado de Pamplona y sus festividades, opinó que "San Fermín no sería lo mismo sin Hemingway", y exculpó al autor de actitudes machistas, ya que la obra fue escrita en la década de 1920 con una mentalidad diferente a la actual.