El fiscal federal Walter Rodríguez, pidió la declaración indagatoria de dos policías santafesinos, por el delito de confabulación para el tráfico de drogas. La causa que investiga a la red de venta y distribución de drogas con asiento en el barrio Yapeyú y que tiene a los hermanos Miguel y Luis "Coco" Bergallo (ex candidato a concejal por el justicialismo) como los principales organizadores. Rodríguez cree y así se lo hizo saber el juez federal Francisco Miño que entre el 2016 y el año en curso, Carlos "Pipi" M. y Adrián N., ambos en funciones, colaboraron con esta organización para concretar el delito de tráfico de estupefacientes. Además se remitió al Ministerio de Seguridad de la provincia un informe de la situación penal de los dos agentes para que desde esa cartera se analice si se lleva adelante alguna medida administrativa. "Siempre sospechamos de la policía provincial desde el inicio, por eso se eligió Prefectura" explicó el fiscal. Los dos efectivos habían 'zafado' la prisión preventiva dictada por el juez, por lo cual ahora Rodríguez pidió que se los incluya en la banda con esta figura de confabulación. "La imputación puede sonar novedosa, es la confabulación que se sostiene por una intervención anterior a la etapa ejecutiva del delito prevista en el articulo 29 bis de la ley de drogas, a la que sumanos también incumplimiento de los deberes de funcionario público" explicó el fiscal a Rosario/12.

La solicitud realizada por el fiscal Rodríguez surge a raíz de la pesquisa judicial que desbarató el 7 de julio pasado al clan familiar Bergallo en una serie de allanamientos efectuados por Prefectura Naval Argentina (PNA) donde fueron detenidas las siete personas que se encuentran en la actualidad procesadas por su rol activo en la organización que operaba en la zona norte de la capital provincial.

Los dos agentes en cuestión, fueron vinculados a la organización liderada por los hermanos Miguel y "Coco" Bergallo tras una serie de escuchas telefónicas donde surgen algunas posibles pistas que determinarían su participación en la distribución de la droga y en la captación de nuevos "clientes".

Para evidenciar eso, la Fiscalía sostiene que en determinados diálogos que mantenían los efectivos se puede advertir que están al tanto del abastecimiento de drogas ‑por kilos‑ a personas ligadas a la venta de cocaína y marihuana.

Los investigadores del caso sostienen que Carlos "Pipi" M. cumplía un rol de enlace en las negociaciones. Desde conseguir compradores, hacer entregas tipo muestras y hasta coordinar los puntos de encuentro.

Entre las escuchas que figuran en el pedido de indagatoria se destacan una: "Acá llegué a la casa de mi amigo, escucha, es la, eh, eh te lo digo por teléfono bueno porque no pasa nada, es la escamosa escamosa" le dice "Pipi" a un sindicado cliente de identidad desconocida. Y el dialogo continúa:

‑ Si la que fuman todos, la que fuman pá tomar.

‑ Escucha, es la escamosa esa bien brillante.

‑ Si esa es.

‑ Porque yo recién, recién fui a ver una y es la misma que yo le había traído al muchacho y no sirve me entendés.

‑ Es la brillosa, vos, ustedes vos la han probado.

‑ Si, si si el loco también la probó.

‑ Tiene gustito bien así bien químico así bien aceitosa.

‑ El gusto a ácido así está bien brillosa.

‑ Ajá, si si gusto a bien ácido químico bien polenta, si porque esa es que quieren viste.

En otra de las escuchas que obran en la causa, el efectivo policial le pide al mismo Bergallo. "Bueno escucha, se clavó, se clavó mal el vago, mal, mal no me encontró a mi bueno viste que yo te había encargado, escucha, si no tenés, mucho apuro, si vos tenes algo, que este bien el necesita mezclar con la porquería que la de... de... para el hormigón", dice el registro de audio. Mientras que Bergallo le contesta: "escúchame, yo con lo que le voy a dar no se va a clavar ni a palos".

El pedido del fiscal Rodríguez argumenta que el policía Adrián N. debe ser llamado a indagatoria ya que el mismo tiene cierto parentesco con el clan Bergallo.