El gobierno provincial, la UOM y un centenar de trabajadores celebraron ayer la reapertura de la ex Mefro Wheels, la fábrica de llantas ubicada en Ovidio Lagos al 4400, tras seis meses de inactividad. Con el ingreso de 15 operarios de mantenimiento, las máquinas de la planta se pusieron en marcha y se estima que en las próximas semanas ingresarán más trabajadores. Pero no toda está resuelto. Ahora se abre una nueva etapa, donde será fundamental que el gobierno nacional acompañe a los nuevos propietarios, los titulares de la autopartista Cirubon, en las gestiones ante las terminales nacionales para que vuelvan a comprarle a la planta rosarina en un contexto atravesado por la apertura de las importaciones. "Mefro Wheels se transformó en una lucha simbólica para los que estamos convencidos de que la Argentina tiene que transitar por un modelo que genere más industrialización nacional y más trabajo", señaló el ministro de la Producción, Luis Contigiani.

La lucha por mantener las fuentes laborales en la ex Mefro y, como resaltó el titular del gremio metalúrgico, Antonio Donello, para mantener la actividad, ya que la planta ubicada en la zona sur de la ciudad es la única del país que fabrica llantas de acero, tuvo ayer su recompensa con su ansiada reapertura. A fines del año pasado, los propietarios alemanes tomaron la decisión de vaciarla y despedir a 170 operarios sin pagarles la indemnización. A partir de ese momento, como describió el abogado de la UOM, Pablo Cerra, tuvieron que sortear infinidad de adversidades para que la fábrica vuelva a producir. 

Pero como también se encargaron de subrayar durante la conferencia de prensa en la que anunciaron la reapertura, ahora se abre un nuevo frente: convencer a las terminales que vuelvan a comprar las llantas que produce la planta rosarina. Por eso no extrañó que el ministro Contigiani haya apuntado al gobierno nacional y acompañe a los ejecutivos de Cirubon para que las automotrices dejen de importar ‑ya trajeron 400 mil unidades en lo que va del año- y vuelvan a encargarle llantas a la planta rosarina.

En ese marco, Ricardo Cicarelli, uno de los propietarios de la autopartista regional, anunció que en los próximos días concretará un encuentro con el presidente la Asociación de Fabricantes de Automotores (Adefa) para avanzar con las negociaciones, aunque no descartó que diversifique la producción en la planta, lo que puede generar una mayor demanda de puestos de trabajo.

"Los que nos involucramos en esta causa sentíamos que no podíamos perder como argentinos y santafesinos a esta única fábrica de llantas de acero, y dimos una pelea titánica", resumió el ministro Contigiani, flanqueado por su par de Trabajo, Julio Genesini, quien recordó que en el medio del conflicto laboral los trabajadores decidieron invertir un dinero que les correspondía por haberes atrasados para comprar chapa y seguir produciendo. También estuvo el concejal Eduardo Toniolli (PJ), quien les entregó a los trabajadores el proyecto aprobado en el Concejo por el cual se declaró que el inmueble fuera de uso industrial, una ordenanza que fue importante para que los titulares del fondo que administraba Mefro Wheels no pudieran vender el predio para un futuro desarrollo inmobiliario.

Los 15 operarios que ingresaron a las 8 para comenzar las tareas de mantenimiento estaban visiblemente emocionados. "La lucha de los últimos 10 meses se pudo plasmar hoy (por ayer) para comenzar a hacer laburos en la fábrica, con prácticamente el 100 por ciento de las personas que terminaron en enero. Vamos a pasos firmes y ya prendimos algunas máquinas para sentir un poquito de ruido. Calculamos que en un par de semanas vamos a estar todos trabajando", señaló a este diario Fernando Ortolani, uno de los operarios.

Sobre el avance del concurso, luego que la jueza María Silvia Baduino decidiera su competencia para que se tramite en los Tribunales provinciales, esta semana habrá una reunión con la sindicatura.