Los separatistas se preparan para una jornada que marcará un antes y un después en la historia de Cataluña. En medio de las amenazas del gobierno español, que volvió a pedir esta mañana la “vuelta a la legalidad”, y las presiones de las empresas privadas que insisten con cerrar sus filiales en esa región si finalmente se declara la independencia, los separatistas se citaron esta tarde en el Parlamento para avanzar en la declaración. Habrá movilizaciones en simultáneo para “garantizar” la proclamación de la república: “¡Avancemos al lado de nuestras instituciones!”, convocaron. Frente a la movilización, la Policía catalana, los Mossos d’Esquadra, montarán un operativo de seguridad para blindar la zona del Parlamento y la Guardia Civil pidió que se bloqueen e investiguen las cuentas de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y la organización Òmnium.

El Gobierno catalán pautó para este martes a las 19 –dos de la tarde en Argentina- su presencia en el parlamento regional para lo que podría ser el último paso en la declaración de independencia unilateral que comenzó con la Ley de Transitoriedad el 7 de septiembre y siguió con el referéndum sin garantías constitucionales del 1 de octubre. Este mañana, los representantes del gobierno de la Generalitat, encabezado por Carles Puigdemont, mantuvieron una reunión aunque no adelantaron cómo será la presentación. “Todas las ideologías tienen derecho a manifestarse de forma cívica y pacífica. Tienen nuestro respeto más absoluto", dijo el vocero Jordi Turull sobre las manifestaciones a favor y en contra de la independencia, quien volvió a denunciar las presiones del Estado español. "Intentando perjudicar la economía catalana acaban perjudicando el conjunto del Estado", aseguró Turull.

La movilización de los separatistas fue convocada para las 18, una hora antes de la posible declaración de independencia, aunque muchas concentraciones comenzarán antes, a partir de las 14. Los independentistas de la Asamblea Nacional Catalana se dirigirán a partir del mediodía a las inmediaciones del parque de la Ciudadella para respaldar a Puigdemont. El parque, sin embargo, donde se encuentra ubicado el Parlamento, está bloqueado desde ayer a la noche por un fuerte operativo de seguridad a cargo de los Mossos d’Esquadra para impedir el accedo de los manifestantes.

Los grupos de Defensa del Referéndum, originados por el partido secesionista Candidatura de Unidad Popular (CUP), también se movilizarán por la tarde a diferentes puntos del paseo Lluís Companys. En tanto, los estudiantes independentistas comenzaron a concentrarse en la zona del Arco del Triunfo con una pancarta que dice “No pasarán”.

El gobierno español volvió a pedir este martes al presidente regional catalán "que no haga nada irreversible, que no emprenda ningún camino que no tenga vuelta, que no lleve a cabo ninguna declaración unilateral de independencia, que vuelva a la legalidad", dijo a la prensa el portavoz del gobierno español, Íñigo Méndez de Vigo.